Con una oferta creciente, una demanda internacional acotada tras la segunda ola de Covid-19 y una industria mejor posicionada iniciando la faena de ganados de corral con destino a la Cuota 481, el mercado del gordo culmina su séptima semana de ajuste a la baja en los valores.
La mayor oferta de ganados de pasto se ve fundamentalmente en vacas, categoría que se coloca con mayor fluidez. Mientras que el novillo pesado presenta mayores dificultades. Las entradas a planta son largas, entre 15 y 20 días, lo que le da más comodidad y poder de negociación a la industria. A su vez, el abasto está más trancado como es característico en esta época del año, presiona sobre el novillo liviano y la vaquillona.
A pesar de las lluvias recibidas en algunas zonas del país, la escasez de agua sigue siendo un factor determinante en el precio del ganado gordo.
El novillo gordo especial cotiza entre US$ 3,10 y US$ 3,17 por kilo en cuarta balanza dependiendo de la calidad. Para la vaca gorda los negocios se concretan entre US$ 2,85 y US$ 2,95 por kilo. La vaquillona cotiza entre US$ 3,05 y US$ 3,10.
En lanares la oferta es abultada pero muchas plantas, iniciando la faena de vacunos para la Cuota 481, comienzan a relegar la faena de ovinos lo que genera un cuello de botella. El cordero pesado cotiza entre US$ 3,50 y US$ 3,55, el capón en el eje de los US$ 3,12 y la oveja en US$ 3,08.