Con una demanda global floja en términos generales, y una China que amplía su oferta de proveedores, EEUU se consolida como una excepción, con poca oferta de carne, buena demanda externa y valores firmes.
“Creemos que esto se va a ir acentuando hacia al segundo semestre en una doble vía: una es la liberación de algunos mercados, o de ciertos nichos. Y la segunda es la potencialidad de abastecer al propio a EEUU. Una vez que se acabe la cuota vamos a seguir abasteciendo a EEUU pagando el arancel”, dijo a Tiempo de Cambio de radio Rural Carlos Riusech, director de Frigorífico Gorina, vicepresidente del Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas (ABC).
En febrero las exportaciones de carne vacuna de Uruguay a EEUU más que duplicaron el volumen enviado en mismo mes un año atrás. Sumaron 11.479 toneladas, ganando participación de mercado frente a una China que por lo contrario, pierde lugar a pesar de seguir siendo el principal comprador. “Sobre China, todo el Mercosur excepto Paraguay somos proveedores estratégicos de China, esa situación no va a cambiar, es un mercado del cual no podemos prescindir”, dijo Riusech.
EEUU, registra su stock ganadero más bajo en 73 años. La cuota de Brasil y otros países para exportar carne a EEUU con ventajas arancelarias se cumplió varias semanas antes que en los últimos dos años. Hasta el 11 de marzo Uruguay hizo uso del 32,9% de la cuota de 20.000 toneladas de carne vacuna que puede exportar a EEUU con ventajas arancelarias.
Para la carne vacuna uruguaya, el precio promedio de las ventas a China es de US$ 3.271 por tonelada de acuerdo a los datos de INAC, y el de los destinos norteamericanos casi el doble, US$ 6.233 por tonelada (ver nota aparte).
Mientras, China abre el juego a más países exportadores. Este martes habilitó 38 plantas frigoríficas de Brasil. “Creemos que es lo lógico, uno si tiene más proveedores hace mas uso de su poder de compra”, comentó el industrial argentino.
“En una visión global, también Europa está bastante deprimida en precios. Israel está en una condición de que no es la optima”, apuntó. “No son tantos los lugares con una demanda importante, significativa. Vemos un mundo más tranquilo en general”.