En respuesta “a las solicitudes de socios globales” la Comisión Europea presentó este miércoles una propuesta para aplazar por un año la entrada en vigor de la legislación de la Unión Europea que obliga a certificar que ciertos productos, como la carne, la madera y la soja, fueron producidos sin deforestar.
Estaba previsto que la nueva reglamentación fuera aplicada desde enero de 2025, por lo que Uruguay está preparando una plataforma que permita a los productores y exportadores cumplir con los requisitos. Según se ha anunciado será presentada en la feria de la alimentación SIAL de París (19 al 23 de octubre).
Será gratuita para los productores la plataforma uruguaya de certificación libre de deforestación
La normativa ha recibido críticas dentro y fuera de la Unión Europea, a nivel político y comercial. “El texto ha sido sometido a una presión extraordinaria en los últimos meses, tanto por parte de la industria como por países como Brasil, Bolivia, Colombia, Perú, Ecuador, Venezuela, Indonesia, Estados Unidos, Malasia, Australia, Nueva Zelanda o Canadá”, apuntó la agencia EFE.
Desde Brasil y Australia piden a la UE posponer la implementación de la ley sobre deforestación
«La Comisión reafirma su apoyo para la implementación del Reglamento de la UE sobre la Deforestación y sugiere un período de adaptación adicional de 12 meses, en respuesta a las solicitudes de socios globales», señala un comunicado del Ejecutivo comunitario.
La propuesta deberá contar con la aprobación del Parlamento Europeo y del Consejo de la UE, que representa a los Estados miembros. Entre los 27 países de la Unión Europea “hay un consenso en no mantener el calendario establecido, con Estados como Suecia, Finlandia, Austria, Polonia y Eslovaquia, así como Alemania, que recientemente han modificado su posición”, afirmó EFE.
«Si es aprobado por el Parlamento Europeo y el Consejo, la ley sería aplicable el 30 de diciembre de 2025 para grandes empresas y el 30 de junio de 2026 para micro y pequeñas empresas. Dado que todas las herramientas de implementación están técnicamente listas, los 12 meses adicionales pueden servir como un período de adaptación para asegurar una implementación adecuada y efectiva», indicó el comunicado.
Algunas de las preocupaciones se enfocan en el posible daño reputacional y la disminución de las exportaciones que podría causar el «ranking» de países que la Comisión tiene previsto publicar antes de fin de año. Este ranking implicaría que los Estados con mayor riesgo de incurrir en deforestación estarían sujetos a un mayor control en sus exportaciones. Otros críticos señalan que el reglamento generará obstáculos burocráticos, especialmente para los pequeños productores y comerciantes.
«La Comisión reconoce que, a tres meses de la fecha prevista para la implementación, varios socios globales han expresado reiteradamente preocupaciones sobre su estado de preparación, la más reciente durante la semana de la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York», agregó el Ejecutivo, que también ha detectado «inquietudes» en algunas partes interesadas dentro de la UE.
La Comisión publicó este miércoles documentos “de orientación adicionales” y un marco de cooperación internacional “más sólido” para apoyar a las partes interesadas mundiales, que “aportarán mayor claridad a las empresas y a las autoridades de ejecución para facilitar la aplicación de las normas”.