Las importaciones de carne vacuna de China aumentarán 2 % en 2025, una tasa de crecimiento más lenta que en años anteriores, de acuerdo a las últimas proyecciones del USDA publicados este lunes en su reporte Livestock and Poultry: World Markets and Trade.
“La incertidumbre económica y la cautela en el consumo limitarán la demanda de carne vacuna. Además, los principales proveedores de carne vacuna esperan con interés los resultados de una investigación especial de salvaguardia”, señaló el reporte.
A esto se suma que la Administración General de Aduanas de China (GACC) dejó que caducara el registro de la mayoría de las plantas de exportación de carne vacuna estadounidense a mediados de marzo, y una parte significativa de la producción de carne vacuna estadounidense ya no puede exportarse a China.
Si bien la carne vacuna estadounidense solo representó el 5 % del total de las importaciones chinas en 2024, China representó el 16 % del total de las exportaciones estadounidenses.
Los productos estadounidenses ahora enfrentan un arancel del 106 %, después de que China anunciara medidas arancelarias de represalia sobre los productos estadounidenses, que ahora ascienden al 84 %. Esto se suma al arancel del 22% sobre la carne vacuna estadounidense que estaba vigente antes de que se anunciaran las nuevas medidas.
“China potencialmente buscará otros mercados para satisfacer la demanda de importaciones, mientras que los exportadores estadounidenses buscarán trasladar la carne vacuna que se destinaba a China a otros mercados”.
El mercado de importación de carne vacuna de China ha estado tradicionalmente relativamente concentrado, y los cinco principales mercados representaron casi el 90% de las importaciones totales en 2024.
Si bien los envíos de carne vacuna de EEUU solo representan una pequeña porción del volumen total de importación de carne vacuna de China, EEUU ha sido un proveedor constante de carne vacuna de ganado alimentado con granos de alto valor, un producto de nicho que podría ser difícil de sustituir.
Australia y EEUU abastecen segmentos similares del mercado de importación de China. La carne vacuna de Australia representó una porción similar de las importaciones de China en 2024, representando el 7% de las importaciones totales. Además, Australia y EEUU se encuentran en puntos opuestos de sus respectivos ciclos ganaderos: se prevé que la producción y las exportaciones de carne de res de Australia aumenten en 2025, mientras que se prevé que la producción y las exportaciones de EEUU disminuyan. Esto, junto con las condiciones comerciales favorables como el resultado del Tratado de Libre Comercio entre China y Australia (ChAFTA) hace que la carne de res australiana sea más competitiva en precio que la carne vacuna estadounidense.
Dado que es probable que las barreras comerciales reduzcan los volúmenes de exportación de carne de res estadounidense a China en 2025, los exportadores estadounidenses buscarán mercados de exportación alternativos.
Otro factor que podría afectar las importaciones totales de China este año es la investigación de salvaguardias para la carne vacuna anunciada en diciembre de 2024.
La investigación surge tras una petición de grupos industriales que alegan perjuicios a la industria ganadera nacional china debido al aumento del volumen de importación de carne de res entre 2019 y 2024.
La investigación concluiría en agosto de 2025 y podría sumar aranceles adicionales o límites cuantitativos a las importaciones de carne vacuna de todos los proveedores.
Es probable que el comercio de carne vacuna con China se mantenga volátil en 2025 debido a la investigación en curso y a la incertidumbre económica general, así como a su impacto en la demanda de carne vacuna.