Con la firmeza de las luvias del 16 de enero consolidadas y nuevvas precipitaciones en el norte, sigue consolidándose un muy buen enero. La ausencia de olas de calor es otro favtor favorable, después del 16 baja la temperatura lo que casi asegura un enero caluroso pero sin excesos. Precio firme de la reposición parece asegurado.
En otro orden, 2023 fue confirmado como el año más caluroso desde que hay registros (y estimado en la más alta temperatura en unos 6.000 años al menos), un factor que desafía al sector cárnico a demostrar que es parte de la solución y no del problema.