La caída del precio de la lana en Australia parece no tener piso. La semana pasada se alcanzaron valores mínimos desde setiembre de 2020, cuando el mercado recién empezaba a remontar tras el impacto inicial de la pandemia de Covid 19.
El Indicador de Mercados del Este (IME) cerró a US$ 7,74 y tanto en dólares como en moneda australiana perdió 3% respecto a la semana anterior debido a la demanda debilitada por la incertidumbre económica global.
La voluntad de China de impulsar el uso de su moneda, el yuan, en los negocios internacionales está llegando al mercado de la lana. Se manejó en la reciente reunión de la Asociación de la Industria Lanera de China (CWIA) e incluso se planteó usar, en menor medida, el dólar australiano. En Australia se estima que esto podría contribuir a cierta estabilidad de valores, atenuando el impacto de los vaivenes cambiarios.
Aunque la oferta semanal de fardos fue la más baja en 9 meses la racha bajista se extendió con caídas más notorias en el extremo de lanas Merino más finas, menores a 19 micras. Quedó sin vender el 25% de los fardos, un porcentaje relevante, ya que muchos vendedores no convalidan los precios.
A una semana del final de la zafra comercial 2022/23 y a tres semanas del receso de verano en Australia, la oferta del próximo martes y miércoles será mucho mayor.
En Uruguay el mercado tuvo mayor actividad según el reporte del Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), que informó varias operaciones. Por lanas Merino en el eje de las 20 micras se realizaron negocios de poco volumen con precios desde US$ 5,10 a US$ 6 por kilo vellón.
Por lanas Ideal en el entorno de 23 micras se concretaron ventas por US$ 3,50 por kilo y un lote Corriedale de 20.000 kilos de lana de 28 micras, grifa verde y con alto rendimiento al lavado cotizó US$ 0,95 por kilo vellón.