“Ni bien aparezcan ganados de campo con estado corporal razonable para faena vamos a volver a faenar todo lo que la oferta permita, pensar en que el novillo siga por arriba de 5 dólares no parece ser lo que el mercado va a marcar, asumimos que el precio va a ser muy razonable y rentable para todo el sector, pero no en esos niveles absolutamente fuera de toda lógica”, afirmó Daniel Belerati, presidente de la Cámara de la Industria Frigorífica.
Belerati advirtió que la relación de precio hacienda exportación (RHE de INAC) “se ha desvirtuado sin razones que lo justifiquen”.
El indicador de 0.92 “no se ha mantenido” y el valor del ganado ha estado por encima del precio de exportación durante prácticamente todo el año 2022. Llegó a 1.084 en julio y en la tercera semana de agosto fue de 1.037.
El presidente de la Cámara de la Industria Frigorífica señaló en Tiempo de Cambio de Radio Rural que “hemos demandado más de lo que el mercado tenía condiciones para ofrecer y eso desvirtuó los números”.
“Cuando se vuelva a la normalidad y todo sea sostenible”, dijo, “una relación de precios de hacienda tiene que estar por debajo del precio de exportación sin pérdidas marcadas para ninguno”.
En ese sentido, apuntó que el precio de exportación no se va a mantener por encima de US$ 5.200 la tonelada en los últimos meses y que tiende a estabilizarse en el eje de US$ 5.000.
“No vemos ningún problema en la colocación en el exterior; China está volviendo a volúmenes de demanda interesantes tras el cierre de varias ciudades por Covid”, afirmó.
Belerati también señaló que la oferta de Brasil está siendo muy voluminosa, y el precio del novillo está en US$ 3,70 “lo que marca una competencia muy dura con nuestros niveles de precios”. Además, Australia está recuperando su capacidad exportadora a medida que se recupera el stock tras la sequía de 2019-2021.
Por otra parte, sostuvo que están todas las condiciones dadas para que en los próximos años se alcance una faena de 3 millones de cabezas.
“Está la seguridad del mercado comprador en materia de volúmenes y razonabilidad de precios, la seguridad de que va a seguir incrementándose el consumo en el mundo con la sola excepción de Europa, y lo que tenemos que hacer es mejorar la eficiencia y la competitividad de la cadena industrial”.