El Omicron derrumba a las bolsas y el petróleo, pero no a los alimentos. Y esto porque el clima empieza a complicar en el Mercosur y en EEUU y empieza a sostener los precios. Es el caso del trigo: arrancó el lunes en baja y terminó recuperando para terminar muy cerca del empate e incluso leves subas. Viene de tres semanas bajistas consecutivas, con bajas moderadas la semana pasada en Chicago que no fueron acompañadas en Kansas, donde la sequía pone en jaque a los trigos duros de invierno (los que produce Uruguay). En este mercado se cortó la racha negativa.
Esta baja ya se expresa en los precios de exportación de Uruguay que cayeron a US$ 265 por tonelada desde referencias que llegaron a estar US$ 20 por arriba. También bajó el trigo para el mercado interno a US$ 270, el de baja proteína cotiza a US$ 240 y el forrajero entre US$ 210 y US$ 225 por tonelada.
En cebada, la que va a malteo tiene referencias de US$ 278 y la forrajera 210. Cotizaciones que contrastan cada vez más con la canola que se paga sobre los US$ 730 por tonelada.
El trigo empató sobre el final este lunes
Como fundamento central de la presión bajista que viene padeciendo el trigo en las últimas semanas se mantiene la entrada de la oferta de trigo del hemisferio Sur en el circuito comercial, donde se destaca Australia, con una cosecha bastante mayor a las previsiones iniciales cuando las tareas de recolección ya superaron el 65% de la superficie apta. Incluso los problemas de excesos de humedad en el Este de ese país perdieron influencia bajista frente al tamaño de la cosecha, que fuentes privadas ubican por encima de los 34 y de los 34,42 millones de toneladas proyectados por el USDA y por ABARES, respectivamente.
Además el sostén para los precios del trigo estadounidense se apoyó en el informe semanal sobre las exportaciones, donde el USDA relevó el jueves ventas de trigo por 650.600 toneladas, por encima de las 239.900 toneladas del reporte anterior y del rango previsto por los operadores, de entre 200.000 y 400.000 toneladas, y el clima extremo en el sur de las Grandes Planicies trigueras, donde los trigos de invierno deberían estar más próximos a ser cubiertos por la nieve que a padecer temperaturas elevadas, vientos huracanados e incendios, como los que se vieron en Kansas y en Estados cercanos. Si bien resulta imposible hablar de pérdidas concretas para una cosecha que comienza a fines de mayo, la situación dista mucho de ser la ideal. En ese sentido, el jueves el USDA indicó que aproximadamente el 53% de la superficie sembrada con trigos de invierno –aportan cerca del 70% de la oferta total– experimenta algún nivel de sequía, contra el 35% de igual momento de 2020.
En el plano internacional, la chance de que China suprima las barreras sanitarias que hoy impiden la compra de trigo de Rusia se destacó entre los fundamentos bajistas. En ese sentido, y aunque sin referencias directas al hecho, a través de una videoconferencia se encontraron el miércoles los presidentes de ambos países, Xi Jinping y Vladimir Putin, donde hablaron de estrechar vínculos comerciales. “Estoy dispuesto a avanzar de la mano con usted, a inaugurar juntos una nueva página en las relaciones chino-rusas en el periodo postpandémico”, le dijo Xi a Putin. El mandatario ruso anunció que visitará Beijín en febrero para la inauguración de los Juegos Olímpicos de invierno, los mismos que tendrán un boicot diplomático de parte de Estados Unidos, Canadá, Inglaterra y de Australia.
Y algo de alivio aportó la confirmación de que el cupo exportable de trigo ruso entre el 15 de febrero y el 30 de junio será de 8 millones de toneladas y no de 9 millones, como se suponía previamente.
Soja firme y puede ir por más
Los precios de la soja también fueron de menos a más este lunes luego de subir en Chicago la semana pasada, en forma permanente de martes a viernes, completó cinco subas consecutivas. Como en el maíz, el factor de suba es el clima en Sudamérica, con falta de humedad en el sur de Brasil, lo que incluye a Paraná, el segundo estado en producción de soja de Brasil.
En buena medida por ese último dato, y por la chance de que una eventual caída en la producción argentina lo que también impacta sobre los mercados de harina y aceite.
El miércoles, en su informe mensual, la Asociación Nacional de Procesadores de Oleaginosas, donde relevó la molienda de noviembre en 4,88 millones de toneladas, por debajo de los 4,94 millones previstos por los privados y de los 5,01 millones de octubre. En ese reporte la entidad marcó una caída en las existencias de aceite de soja.
La soja llegó a US$ 460 Nueva Palmira y de acuerdo al pronóstico va por más
Acerca de las exportaciones semanales estadounidenses, en este caso para el segmento del 3 al 9 de diciembre, el USDA relevó ventas de poroto de soja 2021/2022 por 1.308.600 toneladas, por debajo de las 1.637.900 toneladas del reporte anterior, pero dentro del rango previsto por los operadores, de entre 1,1 y 1,76 millones de toneladas. De ese total, 985.800 toneladas correspondieron a compras chinas, incluidas 402.000 toneladas confirmadas hacia destinos desconocidos. Además, el USDA relevó ventas 2022/2023 por 140.000 toneladas.
En Brasil la consultora AgRural redujo de 145,40 a 144,70 millones de toneladas su estimación sobre la cosecha de soja, un volumen que se mantiene por encima de los 144 millones proyectados por el USDA y de los 142,79 millones calculados por la Conab.
Vale destacar que si bien preocupa lo que ocurre con los cultivos del Sur de Brasil, por la falta de humedad, en el Centro y en el Norte los cultivos lucen muy bien gracias a lluvias regulares. Además, por el adelanto en las siembras, se prevé que la soja de Mato Grosso, el mayor Estado productor, comience a ingresar en el circuito comercial durante las primeras semanas de enero, lo que resultaría negativo para las necesidades de los vendedores estadounidenses y, por ende, bajista para los precios en Chicago.
Maíz
La firmeza en el mercado internacional estuvo sustentada la semana pasada por las fuertes exportaciones de EEUU y el estrés hídrico que se evidencia en el sur brasileño, donde se concentra cerca del 50% del área sembrada con maíz de verano. Se empieza a especular con problemas en la siembra del maíz safrinha por las previsiones de lluvias inferiores a los registros normales para los primeros meses de 2022 en zonas productoras de Brasil. Este lunes se mantuvieron estables las cotizaciones.
Mientras se observan amenazas a la oferta se mantiene un buen ritmo de las exportaciones de los Estados Unidos, donde el jueves el USDA relevó ventas de maíz 2021/2022 por 1.948.700 toneladas, por encima de las 1.132.500 toneladas del informe anterior y cerca del máximo previsto por los operadores, en un rango que fue de 1,2 a 2 millones de toneladas. Con 1.289.100 toneladas, México fue el principal destino, mientras que Canadá se mantuvo en un segundo puesto, con 272.600 toneladas.
En Brasil, Safras & Mercado redujo de 119,25 a 116,08 millones de toneladas su estimación de la cosecha de maíz, por debajo de los 118 millones de toneladas que proyecta el USDA y de los 117,18 millones de Conab. El motivo es la baja de la cosecha de verano, de 25,72 a 22,55 millones de toneladas por “ la sequía que golpea especialmente a los Estados de Rio Grande do Sul y de Santa Catarina, en el sur brasileño”.
IHS Markit ajustó de 29,50 a 28,30 millones de toneladas su previsión sobre el volumen de la cosecha de maíz de verano. A principios de la semana, AgRural redujo de 115,50 a 114,40 millones de toneladas su estimación sobre el volumen total de la cosecha de maíz.
Argentina cuotifica exportaciones de maíz y trigo
El viernes el Ministerio de Agricultura de la Nación publicó una resolución en el Boletín Oficial por la cual se establecieron «volúmenes de equilibrio para la demanda interna de maíz y de trigo» y se fijaron los volúmenes exportables de ambos granos. En el caso particular del maíz 2020/2021, se fijó como objetivo exportable «de manera que no comprometer el abastecimiento al mercado interno» un volumen de 41,60 millones de toneladas, un récord absoluto, que supera los 39,74 millones de toneladas publicados en el último informe mensual de estimaciones agrícolas del organismo y los 38,50 millones previstos por el USDA. Actualmente el registro de declaraciones juradas de ventas al exterior tiene declarados 39,92 millones de toneladas, pero los exportadores tienen compras acordadas –al 8 del actual– por 41,54 millones de toneladas.