Diciembre arranca con una mayor demanda industrial que se traduce en entradas más cortas, valores que se afirman para la hacienda gorda, sumado a lluvias de escaso volumen, pero continuas y una oferta poco voluminosa para este momento del año.
Los negocios se concretan en el eje de US$ 5,10 hasta 5,20 por kilo por novillos y entre US$ 4,80 – US$ 4,90 por kilo para las vacas con algunos centavos más por lotes especiales.
El promedio del novillo según la Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG) trepó este lunes de US$ 5,12 a US$ 5,15 por kilo, la primera suba en siete semanas. Los novillos especiales de exportación corrigieron de US$ 5,17 a US$ 5,21.
La vaca recuperó un centavo a US$ 4,78 y la vaquillona cerró su cuarta semana en US$ 5, sin cambios. «Con demanda más activa y entradas cortas, mercado firme», fue el comentario de la Asociación.
Está cerrando un “año ganadero excepcional”, comentó José Aicardi, director de Megaagro.
“Pienso que hasta el 20 y pico de diciembre, que la gente planifica normalmente su salida del año, puede ser que tengamos un valor que pueda ir escalando algo semana a semana, pero lentamente”, estimó el operador.
Que la industria mantenga una intención fuerte de faena será clave, con ganado de corral que ha jugado un papel fundamental en este 2025. Para el cierre del año Aicardi estima que el volumen de ganado proveniente de encierros pueda rondar los 700.000 vacunos.
“Creo que vamos a ser un país ganadero más criador y recriador que invernador, y más encerrador, por lo tanto, donde los corrales pasan a tener otro protagonismo”, apuntó.
La relación grano-carne por lo menos en el horizonte más cercano va a seguir siendo positiva, consideró Aicardi. “Hay gente haciendo pruebas con arroz también, que es un grano que está bastante depreciado y que capaz que entra al ruedo, con lo cual me afirmo en que por lo menos en el mediano plazo esa relación con grano, está el volumen, da la relación y va a permitir que los corrales sigan”.
El mercado internacional de la carne vacuna se sostiene netamente arriba de los US$ 5.000 por tonelada, con una firmeza estructural, y una oferta a nivel global que en 2025 caerá por primera vez en cinco años, según las proyecciones de Rabobank (ver nota aparte).
En el mercado de reposición hay más demanda que oferta, con valores que tienden a estabilizarse, con ganados que han ajustado el valor en kilos pero que se han apreciado al bulto.
Los promedios de ACG cambiaron de signo, con subas de tres centavos para el ternero hasta US$ 3,26, de tres centavos para la vaca de invernada hasta US$ 2,12 y de un centavo para las terneras que hicieron US$ 3,04. «Con poca oferta, continua la buena demanda», comentaron los consignatarios.
En lanares, una mayor oferta y entradas más largas ponen un freno a la suba de valores que llevó al cordero a máximos históricos.
El promedio de negocios de ACG de la semana pasada mantiene al cordero en US$ 5,75 por kilo, casi 40% más que un año atrás, y también incambiados los corderos mamones en US$ 5,78 y los borregos en US$ 5,74.
Las categorías adultas ajustaron 4 centavos; las ovejas promediaron US$ 4,79, la primera corrección a la baja en 30 semanas, desde abril.