Un informe del USDA advierte que la demanda de soja de China caerá 2,5% en el año agrícola 2023/24 que comienza en octubre, en comparación al que está por terminar.
La oficina del USDA en Pekín estimó que en el ciclo 2023/24 la importación de soja por parte de China se desacelerará para reducirse a una cifra de 98,5 millones de toneladas respecto a los 101 millones de toneladas en 2022/23.
“Las perspectivas de crecimiento económico de China se han debilitado en los últimos meses, lo que plantea un desafío para la demanda de productos oleaginosos, particularmente en los sectores porcinos y avícolas”, señala el documento.
En los últimos 10 meses (octubre 22 a julio 23) las importaciones de China suman 84,3 millones de toneladas, un incremento de 8,7 millones de toneladas respecto al período anterior para un aumento de 10% en la demanda.
Se espera que entre agosto y setiembre China haya completado embarques por otros 17 millones de toneladas, que es el promedio de los últimos tres años, para completar un volumen récord de 101 millones de toneladas.
Las importaciones récord durante 2022/23 se pueden atribuir a varios factores, incluidos precios relativamente más bajos y la reactivación de la demanda de harina de soja (SBM) y aceite vegetal tras el levantamiento de las restricciones de COVID en China. Esta recuperación se vio respaldada además por la abundante oferta del Brasil tras una cosecha récord, señala el informe del USDA.
Hasta agosto Brasil reporta exportaciones por 81,7 millones de toneladas, un notable incremento en comparación al total de 2022, que fue de 77,8 millones de toneladas.
La retracción de China en el próximo año responderá a una mayor producción interna de soja y mayores existencias de soja importada.