El precio de la soja en Chicago cerró con leve baja en la posición mayo (-0,35%) y mantuvo los US$ 537 por tonelada para julio y los US$ 519 para contratos en agosto.
El avance de la monumental cosecha en Brasil, que ya alcanza el 82%, presiona con primas muy bajas sobre los precios de la oleaginosa, así como las previsiones de que la producción brasileña esté más cerca de los 157 que de los 153 millones de toneladas.
El mercado también reaccionó ante el anuncio de la tercera edición del dólar soja, con una tasa de cambio preferencial de $ 300 por dólar para las exportaciones. Se estima que el programa pondrá entre 5 y 10 millones de toneladas de la magra cosecha argentina en el mercado y activará a la industria aceitera exportadora.
Por otro lado, lluvias recientes en regiones sojeras de Estados Unidos resultan claves para avanzar con las siembras, lo que suma a la inercia bajista, señaló la Bolsa de Comercio de Rosario.
Este martes la posibilidad de que el USDA ajuste sus previsiones sobre las existencias en Estados Unidos podría empujar los valores. El promedio de las proyecciones privadas ubica el stock en 5,39 millones de toneladas frente a los 5,72 millones en marzo.
Los cereales, por su parte, culminaron con ganancias ante el ajuste de posiciones de cara al informe mensual del USDA de este martes.
El trigo en Chicago cerró con ganancias en todas sus posiciones ante la incertidumbre acerca de los granos del Mar Negro; US$ 249,31 la posición mayo y US$ 253,81 para julio.
Rusia amenazó con retirarse del acuerdo sobre cereales negociado con la ONU a menos que se eliminen los obstáculos a sus exportaciones agrícolas y de fertilizantes. Se agrega otro factor alcista: las preocupaciones sobre la persistencia del clima seco en algunas de las principales regiones productoras de Estados Unidos, en el mes en que se define el potencial de rendimiento, que también dieron impulso al precio.
Los futuros de maíz rebotaron 1,55% luego de haber perdido 2,5% la semana pasada y finalizaron la jornada con ganancias: US$ 257,47 para mayo y US$ 248,22 la posición julio.
El ajuste de posiciones por parte de los fondos de inversión de cara a la publicación del informe mensual del USDA de este martes apuntaló a las cotizaciones, así como las dudas acerca del comercio de los granos de Ucrania y Rusia también sostienen los precios.
Las buenas condiciones para la siembra en el Medio Oeste de Estados Unidos en las próximas semanas limitaron subas aún mayores para el maíz.