La oficina del USDA en la Unión Europea prevé que el 2020 sea un año de turbulencia para el sector cárnico del bloque, pero no de crisis.
En su informe GAIN Livestock and Products Annual señaló que la producción de carne vacuna de la UE caerá en 2020 más significativamente de lo que se pronosticó en su reporte previo, con una producción ganadera que se contrajo debido al brote de COVID-19. “La producción y el consumo de carne de vacuno de la UE están sufriendo un declive estructural”, señaló el reporte.
Teniendo en cuenta el cierre generalizado de restaurantes en todo el bloque, asociado a las normas impuestas de distanciamiento social, el consumo de los cortes de carne de alta calidad fueron los más afectados respecto a todos los demás productos cárnicos. Reflejándose en una caída en las importaciones, particularmente en la Cuota Hilton.
Para el 2020, se espera que la faena disminuya 1,6% respecto al año anterior, a 26,25 millones de cabezas.
Sobre la base de una menor faena, el USDA prevé una reducción aún mayor de la producción de carne vacuna de la UE en 2021 y una caída en el consumo. Sin embargo, proyecta que las importaciones de carne de alta calidad se recuperen el año próximo, en tanto mejoren las condiciones sanitarias vinculadas a la pandemia de COVID19 y la reapertura del sector de servicios de alimentos en toda la UE.
A diferencia de la carne vacuna, en carne porcina los precios alcanzaron los mayores niveles de los últimos 20 años , y con expectativas de exportaciones récord, el sector porcino esperaba una producción de cerdos récord en este 2020. La pandemia de COVID-19 afectó los procesos industriales, pero aún así la producción de carne de cerdo para el cierre del 2020 se espera que supere la de 2019.
