Con lluvias persistentes que superaron los 100 mm, vientos fuertes y temperaturas muy bajas, el temporal de este 2 de setiembre significó un golpe más para el sector ovino que estaba en plena parición.
En el norte los daños son importantes.
Por lo demás, los suelos quedaron bien de aguas en todo el país, especialmente en el norte y este. Hasta mediados de setiembre habrá suficiente agua en los suelos como para consolidar un año de rebrote temprano de las pasturas y prolongar el buen desarrollo de los cultivos de invierno.