El stock vacuno se encamina a estar entre los 11,4 – 11,5 millones de cabezas a julio de este año, una caída que rondará las 400.000 cabezas frente al año pasado, de acuerdo a las proyecciones manejadas por Esteban Montes, técnico del Instituto Plan Agropecuario.
En la estimación del técnico, considerando una faena constante de 55.000 reses a partir de febrero hasta el 30 de junio, hace en que en ejercicio julio 2021-junio 2022 la faena sea de 2,75 millones de cabezas. “Ponemos al sector en una fuerte extracción”, dijo a Tiempo de Cambio de radio Rural. La exportación en pie llegaría en torno a las 240.000 reses.
Teniendo en cuenta esos dos parámetros, “llegaríamos al fin del ejercicio, al 30 de junio, con unas 300-400 mil cabezas menos”, apuntó. “Tendríamos un stock en el entorno de un millón y medio”.
Que baje un poco el stock es razonable, consideró. Lo que baja es la vaca de invernada y los novillos de más de tres años. Esas dos categorías estarían posicionándose en niveles muy bajos, del entorno de 200.000 cabezas, dijo Montes. El año pasado eran 400.000. “Eso se vendría muy abajo. Lo haría un stock muy joven y criador. Mantendríamos el stock de vacas de cría en el stock. La apuesta a la cría sigue estando”.
Los terneros rondarán los 2,94 millones, de acuerdo a su estimación.
“Después creo que tiene que empezar a responder el stock en cuanto a producir mayor cantidad de terneros. Si nosotros tenemos 2,7 millones de reses que se faenan, 250.000 que se exportan en pie, más una mortandad en torno a 300.000, salen del sistema 3,250 millones de cabezas. Si producís 3 millones de terneros te van a faltar cabezas todos los años”, sostuvo.
Para equiparar esa realidad, por un lado puede ser que el lugar que dejan esos novillos y vacas de invernada sea ocupado por vacas de cría. Manteniendo un stock de vacas de cría del entorno de 4,6 millones -200.000 más que las actuales- el porcentaje de marcación llevarlo a 70%, ahí puede equipararse esa cantidad de animales, apuntó.