El mercado de la hacienda goda se afirmó en la semana luego de un intento de ajuste de la industria a mediados de la semana pasada. Las lluvias de los últimos días permitieron que se afirmaran los valores, generando expectativa en los productores y beneficiando el rebrote de praderas y crecimiento de verdeos.
Se mantiene un marcado interés por vacas. Las vacas gordas cotizan entre US$ 3,10 y US$ 3,15. La demanda del abasto sigue sostenida, principalmente por vaquillonas, que cotizan entre US$ 3,20 y US$ 3,25 llegando a valer igual o más que el novillo.
Los negocios concretados por los mejores novillos se realizan en el entorno de los US$ 3,25, pudiéndose lograr los US$ 3,30 en casos excepcionales de volumen y excelente calidad. Los novillos Holando cotizan entre US$ 3,10 y US$ 3,15.
Gustavo Basso de GB Negocios Rurales dijo a Blasina y Asociados que ‘El negocio con el novillo está ‘chato’ porque no hay demanda. La industria está haciendo negocios de volumen y bajo valor. China, Chile y Estados Unidos son los mercados a los que se está abasteciendo. Israel quiere volver a faenar, pero el problema para la industria es que genera un desequilibrio en el novillo al llevar solamente cortes del delantero, los cortes del trasero deberían congelarse al no tener un mercado que los absorba’.
En los lanares el mercado está firme. Con China como comprador principal y una menor participación de Brasil. ‘La caída de las exportaciones a Brasil es por un tema netamente cambiario. La carne importada pierde competitividad en la góndola’, explicó Basso.
Los corderos y borregos cotizan entre US$ 3,50 y US$ 3,60. Los capones en el eje de los US$ 3,20 y las ovejas en US$ 3,15.