Dos negocios por lanas Merino en el mercado local alcanzaron los US$ 10 por kilo base sucia en la última semana, una cotización que no había sido alcanzada en la primera mitad de la zafra 2022/23.
Se destacó un lote Merino de 43.000 kilos 16,9 micras, acondicionado con grifa verde y certificación RWS a US$ 10,16 vellón y US$ 2,50 subproductos. Y un lote Merino de 6.000 kilos 17,5 micras acondicionado con grifa verde y certificación RWS a US$ 10 el kilo vellón.
Australia: impulso previo al receso
Los mercados australianos entraron en receso hasta el 9 de enero luego de dos semanas con precios al alza que representaron la mayor suba para diciembre en 40 años, 10,8%. El Indicador de Mercados del Este (IME) cerró a US$ 9,09 por kilo base limpia. Había perdido la referencia de US$ 9 en setiembre.
La lana cobró impulso en la última semana de actividad, en un mercado demandado y con intensa puja por los lotes –especialmente las lanas de mejor calidad y con certificaciones-. Se vendió el 93,4% de una voluminosa oferta de 47.914 fardos, superando largamente el promedio de 33.900 fardos semanales para la cosecha 2022/2023.
Mercado local
Para Pablo Iramendi, presidente de la Unión de Consignatarios y Rematadores Laneros del Uruguay, “este movimiento alcista, que por suerte lo hubo, permitió reactivar y mover un poco la actividad”. Aunque considera que “no es una suba consistente que vino para quedarse” sirve para cerrar el año con mejores referencias y permite tener expectativas de que en la segunda parte de la zafra los precios “se vayan afirmando lentamente”.
Los valores actuales están entre US$ 1,5 y US$ 2 que hace un año atrás para las lanas más finas. La brecha es un poco menor en otros micronajes.
La demanda europea sigue cautelosa. Persisten las complicaciones energéticas y los costos altos, al punto que las industrias consultan por lanas lavadas y peinadas.
China precisaba asegurarse materia prima antes del receso y tiene por delante la temporada de Año Nuevo, aunque persisten las complicaciones por el Covid, tanto para el consumo como para la operativa de la industria textil.
Los precios de US$ 10 por lanas Merino finas “no son malos”, subrayó Iramendi: “Malos es el precio del Corriedale, que está en un piso y no se venden cambios a corto plazo”.
Más allá de negocios puntuales y referencias corregidas al cierre de la operativa 2022 “es razonable que haya productores que quieran seguir esperando mejores valores”.