Representantes de la Unión Europea se acercaron al gobierno de Brasil para reavivar las negociaciones con Mercosur sobre un acuerdo de libre comercio que está estancado, según fuentes consultadas por la agencia Reuters.
El contacto se produce en medio de rápidos cambios en las cadenas de suministro mundiales a raíz de la pandemia y la guerra de Ucrania, que han aumentado la influencia de Brasil como potencia agrícola, según un funcionario brasileño que habló bajo anonimato ya que las conversaciones son privadas.
Desde 2021, la UE ha propuesto una carta complementaria al acuerdo para incluir garantías sobre el medio ambiente, preocupaciones desencadenadas por el aumento de la deforestación en la Amazonia que se ha atribuido internacionalmente al gobierno del presidente Jair Bolsonaro.
Sin embargo, esta adenda aún no se ha redactado. Cuando la UE planteó un agregado al TLC en temas de medio ambiente, el Mercosur respondió que “era aceptable” si fuera “vinculante” también para el bloque europeo.
“En esa materia creo que Uruguay está a la vanguardia y definitivamente hay muchos países de la Unión Europea que es probable que no puedan calificar en los estándares que Uruguay sí califica”, dijo el canciller uruguayo Francisco Bustillo ante la Comisión de Asuntos Internacionales de Senado.
Hace dos semanas, funcionarios de los ministerios de Economía y Relaciones Exteriores de Brasil sostuvieron una conversación preliminar con emisarios de la UE, y está prevista una nueva reunión a fines de septiembre para delinear nuevas conversaciones.
“Volvieron a discutir el acuerdo entre Mercosur y la Unión Europea precisamente porque necesitan commodities agrícolas, minerales y energéticos. Ya no pueden contar con Rusia, está el problema de la interrupción de la cadena de suministro, la dependencia excesiva de Asia”, dijo la fuente.
Un diplomático europeo confirmó a Reuters la reanudación de los contactos para iniciar una nueva ronda de conversaciones sobre el acuerdo del Mercosur, que ha llevado dos décadas negociar y crearía el mercado libre más grande del mundo en términos de población.
Según la fuente brasileña, los europeos están interesados en internalizar el acuerdo y los dos lados de la mesa ahora discutirán los términos, y la carta complementaria sobre preservación ambiental se espera para fines de este año.
Las negociaciones del pacto comercial entre la UE y el Mercosur de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay se completaron en 2019, pero las preocupaciones ambientales generaron resistencia a la aprobación del acuerdo por parte de los parlamentos de los 26 estados miembros de la UE.
El intento de reanudar las conversaciones se produce dos meses antes de las elecciones en las que Bolsonaro compite con Lula Da Silva, quien está a favor de reabrir las negociaciones para agregar disposiciones sobre el medio ambiente, pero también sobre derechos humanos y transferencia de tecnología.
Los asesores de Bolsonaro dicen que el acuerdo no debería reabrirse.
El mes pasado, la diputada europea Anna Cavazzini y otros dos eurodiputados del grupo político Verdes/ALE visitaron Brasil para evaluar la amenaza que representa para la Amazonia la extracción ilegal de oro y la tala que ha aumentado bajo Bolsonaro.
Cavazzini dijo a Reuters que las preocupaciones ambientales significaban que no había forma de que el acuerdo comercial fuera aprobado con Bolsonaro en el cargo.
Francia, el mayor productor agrícola de la UE, es uno de los mayores opositores al acuerdo y dijo el año pasado que no había posibilidad de ratificarlo.
En base a Reuters y Bloomberg