El mercado de la hacienda gorda detiene la suba. Luego de seis semanas consecutivas de alza en los valores hasta alcanzar máximos desde enero de 2020, la industria pone un freno. La firmeza en el mercado internacional de la carne tanto en la demanda como en los precios y una oferta menor a la esperada en este momento del año sostienen los valores.
El novillo gordo de pasto cotiza entre US$ 3,80 y US$ 3,85 por kilo en cuarta balanza, y son lotes puntuales los que han alcanzado los US$ 3,90 dependiendo de la calidad del ganado, el volumen del lote y el flete.
La preferencia de la industria por todo tipo de vacas impulsada por China lleva a precios de punta en esta categoría que alcanzan los US$ 3,60. Por vaquillonas, los negocios se concretan en el eje de los US$ 3,70. Las entradas a planta se han acortado y rondan los cinco días a una semana.
Alejandro Zambrano, director de Zambrano y Cía. dijo a Tiempo de Cambio de radio Rural que “sigue el interés por ganados y a precios firmes de la mano de una demanda internacional ávida y una industria que faena todo lo que se ofrece, pero no hay una nueva suba de valores”.
El mercado de lanares está muy firme. “Hay un mayor interés por carne ovina en el exterior y por ende de las industrias. Pero lo que escasea es la oferta y posiblemente esto sea por mucho tiempo. Lo que llevará a que los precios altos se consoliden de mantenerse el interés en el exterior”, indicó Zambrano.
En la grilla de Asociación de Consignatarios de Ganado los corderos alcanzaron máximos desde febrero de 2020. Los livianos subieron ocho centavos a US$ 3,68, los pesados siete centavos a US$ 3,70, los borregos a US$ 3,67, los capones US$ 3,55 y las ovejas subieron seis centavos a US$ 3,42.