El Departamento de Agricultura de EEUU proyecta un crecimiento de las importaciones de carne vacuna de ese país que, de confirmarse, llegarían a un récord en 2025.
La producción de carne vacuna estadounidense caerá 4% interanual de la mano de una contracción del stock ganadero, de acuerdo a su último informe trimestral Livestock and Poultry: World Markets and Trade, publicado la semana pasada.
La disminución de la producción estimulará las importaciones que, según la proyección del USDA, crecerán 1% en 2025 y tocarán un récord de 2 millones de toneladas.
De hecho, la participación global de las importaciones de carne vacuna de EEUU serían las más altas en una década, mientras que el share en las exportaciones mundiales sería el más bajo, al menos, desde 2012.
EEUU será en 2025 el segundo principal importador de carne vacuna del mundo, con una participación de mercado global de 18%.
En 2024 las importaciones de carne vacuna de EEUU sumarían 1,988 millones de toneladas, un salto de 17% frente a las 1,69 millones de toneladas de 2023.
Las últimas estimaciones apuntan a un descenso de 12% en los envíos de carne vacuna de EEUU al exterior en 2025 a 1,2 millones de toneladas el año que viene por la escasez de suministros internos y la competencia de Australia, particularmente en el este de Asia.
La producción de carne vacuna de EEUU en 2025 caería a 11,8 millones de toneladas en 2025, 4% por debajo de las 12,29 millones de toneladas esperadas para este año.
El consumo interno estadounidense también se retraería pero en menor proporción, 2,3%.
El stock vacuno de EEUU caería 1,3% interanual en 2025 a 86 millones de cabezas frente a 87,157 millones estimados para este año.