La caída del stock ganadero y una menor demanda internacional por carne vacuna como consecuencia del brote de coronavirus en China y Europa -principales mercados de la carne uruguaya- llevó a un descenso en la faena trimestral al nivel más bajo desde 1999.
Según se desprende de los datos del Instituto Nacional de Carnes, en los primeros tres meses del año la faena de vacunos alcanzará las 460.000 cabezas aproximadamente, un 25% menos que las 619.127 cabezas del mismo período del año pasado.
Esta caída está impulsada por un descenso de 34% interanual en la faena de vacas y de 21% en la faena de novillos.
En el primer trimestre del año se faenarán en el entorno de 232.000 hembras -vacas y vaquillonas- contra 328.839 del mismo período del año pasado, consolidándose como la más baja en siete años.
La faena de novillos sumará 223.000 novillos, frente a los 278.157 del primer trimestre del año pasado y la faena más baja desde 1995 para ese período. El mayor descenso fue en los novillos de 8 dientes y 6 dientes (41% y 33% respectivamente). Mientras los de dientes de leche aumentaron 23% interanual.
