Con los precios de exportación siguiendo una trayectoria similar a la que tuvieron en 2022, empieza un período que debe ser seguido con atención.
En aquel entonces, con precios más altos que los actuales en este mes empezó a revertirse el ascenso de precios.
Eran otras circunstancias. La dependencia de China era total. Ahora son EEUU y la Unión Europea los que empujan y China acompaña. Los destinos son más diversos. Pero aún así, es este un mes de alta importancia.
El 2025 puede ser un año aún mejor que el 2022, no porque llega a los picos de precios que ocurrieron en aquel entonces sino porque ocurra una persistencia de precios similares a los actuales.
El mercado interno parece bien abastecido por carne importada, en la última medición de IPC conocida este miércoles la carne bajó 0,5%.
Es decir, el precio del ganado para faena depende para sostenerse únicamente del precio de exportación y de la voluntad que muestre la industria por seguir faenando a estos valores. La faena de las próximas semanas será un dato fundamental para evaluar la sostenibilidad de los actuales precios.