De 50 a 49,5 millones de toneladas fue ajustada la proyección de producción de soja de Argentina en la campaña 2023/24, según un informe Gain de la oficina en Buenos Aires del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA).
El recorte de producción se fundamenta en el impacto que puede haber producido en los cultivos la ola de calor y el tiempo seco en enero y febrero “a pesar las lluvias ideales después de la siembra”.
Con muy buenas lluvias en la última semana, tanto la Bolsa de Comercio de Rosario como la Bolsa de Cereales de Buenos Aires modificaron sus previsiones exactamente a la inversa: elevaron la cosecha de soja de 49,5 a 50 millones de toneladas con un rendimiento promedio por encima de los 3.000 kilos por hectárea.
La estimación de exportación del USDA se incrementó de 5,1 MT a 6 MT, en línea con una reducción de las importaciones desde 5,1 MT a 4 MT respecto al informe anterior.
La molienda se incrementó 12% en enero pese a los limitados stocks luego de la “desastrosa cosecha” del año anterior, y entre 2023 y 2024 crecerá de 26,5 a 39 millones de toneladas.
A su vez la producción de girasol fue reducida sensiblemente, de 4,1 a 3,5 millones de toneladas, casi 15%, como consecuencia de que el área sembrada fue menor a la esperada.