Los casos de vaca loca parecen consolidar la demanda local, aunque la industria no parece dispuesta a mejorar valores que conforman a lo largo de la cadena cárnica. La referencia de los mejores novillos se ubica entre US$ 4,25 y US$ 4,35, y el mercado puede considerarse estabilizado, con una demanda que sigue firme, entrada que se han acortado y una oferta que para ganados de calidad es escasa. También hay heterogeneidad en la oferta que llega a plantas.
Las mejores vacas cotizan hasta US$ 4,15 aunque las operaciones más frecuentes se ubican entre US$ 4,05 y US$ 4,10.
La estabilidad también parece ser la lógica del mercado brasileño más afectado en Rio Grande del Sur por la liberación de campos para el cultivo de soja que por problemas causados por una suspensión temporal de exportaciones que se sigue esperando será breve.
En el ovino sigue el ascenso y los mejores corderos se consolidan en US$ 4,50 con demanda por todas las categorías.