El precio de leche que recibieron los productores brasileños en enero cayó 4,3% en promedio a nivel país respecto a diciembre, de acuerdo a los datos manejados por el Centro de Estudios Avanzados en Economía Aplicada (Cepea) de la Universidad de San Pablo.
Se ubicó en R$ 2,0344 por litro (aproximadamente US$ 0,37). Aún así, la cifra es un 42,6% superior a la registrada en enero de 2020 y representa un nuevo récord para este mes.
Con una demanda floja en diciembre y enero fueron determinantes en la caída de precio. Ante la inestabilidad del consumo, señaló Cepea en base a fuentes consultadas, las industrias apuntan a mantener los stocks controlados para evitar caídas bruscas de precios.
La reducción de la demanda agregada de la mano de una caída en el poder de compra de los ciudadanos brasileños (debido a la pandemia, el final de asistencia financiera y la suba del desempleo). “Se espera que estos factores continúen desacelerando el consumo de lácteos en los próximos meses, lo que, a su vez, tiende a presionar a las industrias para que bajen los niveles de precios de la leche pagados a los productores”, apuntó el informe mensual de Cepea.
Si bien se espera que la caída en el precios de la leche al productor continúe en febrero y marzo, el promedio en este primer trimestre en 2021 superaría al registrado en el mismo período en 2020, cuando fue de R$ 1,4655 por litro (US$ 0,268).
Aunque los precios de la leche se encuentran en niveles considerados altos para el período del año, la apreciación considerable y continua de los granos (componentes principales de los costos de producción de la lechería) ha comprometido la rentabilidad del productor y limitado el potencial de crecimiento de la actividad.
El poder de compra de la leche a retrocedido. En 2020 se necesitaban 34,3 litros de leche para comprar una bolsa de 60 kilos de maíz en 2020, un aumento de 22% respecto al año anterior. Según Cepea, en enero el ratio aumentará a 40 litros.