Con una gran escasez de oferta, julio cerró con una faena de vacunos apenas superior a las 150.000 cabezas, la más baja en seis años para ese mes impulsada por una menor actividad de vacas que no llegó a ser compensada por el aumento en la actividad de novillos.
En el séptimo mes del año se faenaron 153.415 vacunos, un 4% menos que los 159.880 del mismo mes del año pasado y un 10% respecto a las 169.583 de junio.
El ajuste estuvo impulsado por una menor faena de hembras –vacas y vaquillonas- que bajó 17% interanual a 72.085 cabezas, consolidándose como la más baja en siete años para ese mes.
Sin embargo, la faena de novillos fue de 79.075 animales un 13% más que las 70.068 cabezas del mismo mes del año pasado pero un ajuste de 5% respecto al mes anterior (83.318 cabezas).
Fuerte ajuste en la faena semanal
En la semana cerrada el 1 de agosto -afectada por un día menos de actividad por paro- se faenaron 30.518 cabezas, 19% menos que las 37.487 de la semana anterior y 12% menos que las 34.731 cabezas de igual semana del año pasado.
El mayor ajuste fue en la faena de novillos que bajaron 26% a 14.419 cabezas, ubicándose 9% por debajo que un año atrás.
La faena de vacas fue de 11.286 cabezas, un 11% menos que las 12.664 de la semana pasada pero un 7% mayor que las 10.551 de igual semana del año pasado.