China importó 1,02 millones de toneladas de carne en marzo, el volumen mensual más alto desde, al menos, enero de 2020, de acuerdo a datos de aduanas publicados esta semana. Se trata de una suba de 11% respecto a las 919.000 toneladas que importó en igual mes de 2020.
El pais asiático retoma gradualmente la actividad tras el impacto de la pandemia de Covid-19, con firmeza en la demanda de carne y con precios que han subido, señaló el trader Daniel Castiglioni, director de la firma Castitrading, que opera en ese mercado desde hace más de diez años.
“Hemos visto falta de oferta de carne del Mercosur en los últimos meses”, y se empezó a reflejar en una suba de precios, dijo al programa Tiempo de Cambio de radio Rural.
Brasil ha visto afectada su exportación, con poca oferta y altos precios del ganado. Desde Argentina hay señales de incertidumbre, con posibles restricciones a la exportación. “No va a haber en los próximos meses una recuperación en la oferta de carne”, consideró el operador. A esto se suma la baja de oferta de Australia, un factor que también incide en el mercado.
El problema generado en China sobre el stock de cerdos por la peste porcina africana no está resuelto y hay preocupación por la aparición de nuevos casos que han surgido a lo largo del país, y que sigue impactando sobre la producción interna de carne de cerdo.
El volumen de carne importado en marzo es probablemente un récord, según Pan Chenjun, analista senior de Rabobank, y refleja la expectativa del mercado de una escasez sustancial de carne después de los nuevos brotes de peste porcina durante el invierno.
También se registra una demanda adicional por carne ovina, con una oferta reducida desde Australia y Nueva Zelanda. “Este año ha ido mucho más carne ovina uruguaya”, destacó Castiglioni.
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