La eliminación de las retenciones a los granos anunciada este lunes por el gobierno argentino agregó un elemento de presión sobre la soja y el trigo.
En plena cosecha de Estados Unidos que alcanzó el 9% del área frente al 12% de 2024 y con China ausente del mercado estadounidense, el estímulo que representa para los productores argentinos vender sin el 26% de retención en el caso de la soja agrega un factor de debilidad a los valores. La soja en a posición julio 2026 bajó a US$ 391,6 por tonelada, una caída de US$ 12 en dos jornadas.
La soja disponible ajustó a US$ 371,5 por tonelada. Las cotizaciones en Uruguay se situaron en el eje de US$ 365 tanto por soja disponible como por la de la próxima cosecha.
Brasil continuará superando récords: la Conab proyectó la semana pasada en 49,08 millones de hectáreas la superficie de soja 25/26 que acaba de comenzar a ser sembrada y en 177,67 millones de toneladas el volumen de la cosecha, seis millones de toneladas más que la zafra pasada.
El trigo también acusó recibo de las novedades surgidas en Argentina en un entorno de alta oferta mundial y perdió US$ 4 en la posición diciembre. Concluyó la rueda en la Bolsa de Chicago sobre US$ 187,6 por tonelada, el valor más bajo para el cereal desde que cotiza esta posición, referencia para la cebada cervecera en Uruguay que se situaba en sobre US$ 189 /ton.
Los futuros de colza cayeron a los valores más bajos desde marzo tanto para la referencia en euros del mercado Matif de París -460 euros- como en el mercado de Canadá, uno de los principales productores del mundo que atraviesa dificultades por la débil demanda de exportación, barreras comerciales por el arancel antidumping de China de 75,8% que le deja afuera de ese mercado, aumentos en las previsiones de producción y efectos indirectos de otros mercados de semillas oleaginosas.
Los índices de referencia mundiales de aceites vegetales, en particular el aceite de colza y el de soja, se han debilitado, y estas fluctuaciones han afectado al sector.
En el sur de Brasil el arroz perdió la referencia de los US$ 12 por bolsa de 50 kilos de arroz cáscara que parecía haber establecido un piso de precios, los más bajos desde enero de 2022.
En la última semana retrocedió de a 10 centavos por día y el lunes cotizó a US$ 11,60 por bolsa. El panorama es complejo de cara a la siembra de arroz de la próxima cosecha, que ve márgenes cada vez más justos y reducirá el área también en función de la disponibilidad de agua en las represas.