Con los paros de lunes 9 y martes 10 anunciados por FOICA a última hora del domingo se complejizó aún más un mercado que ya venía distorsionado por las medidas sorpresivas adoptadas por los trabajadores de la industria frigorífica desde el viernes 29 de noviembre.
La semana arranca con plantas que no están pasando precio. Las que compran y mantienen valores similares a los que venían proponiendo están dando entradas largas, ya para después del 20 de diciembre, comentó un consignatario consultado por Conexión Agropecuaria.
Se corren cargas. Hay ganados dentro de los frigoríficos que no se van a poder faenar. Hay más oferta. “Incide en el mercado”, dijo el consignatario. La Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG) lo explicitó en su comentario de este lunes que da cuenta de un mercado firme, con disparidad de valores y distorsión en cargas. «Preocupación por medidas gremiales que afectan el normal funcionamiento del mercado», expresó ACG.
Para Christopher Brown, director de Agro Oriental lo más difícil es conseguir las entradas. La industria tiene ganado sin levantar, cargas atrasadas y espera ver cómo se soluciona este conflicto antes de “salir a la cancha nuevamente”, dijo el consignatario a Tiempo de Cambio de radio Rural.
La firmeza marcada que venía de las semanas anteriores encuentra un parate en este conflicto. “Una vez que se solucione este tema, todo indicaría que el mercado debería de continuar el dinamismo y los valores firmes que veníamos teniendo”, consideró, de la mano de un mercado externo demandante y con buenos valores.
Hubo ganado que fue devuelto desde alguna planta a sus establecimientos, comentó Brown. “Todo esto dificulta y genera problemas bastante importantes”, subrayó.
Las últimas referencias previo a este conflicto eran de US$ 4,05 hasta US$ 4,15 para los mejores novillos, o algún centavo más en lotes excepcionales con poco flete. La vaca gorda pesada US$ 3,75 hasta US$ 3,85 en ganados de punta. Ahora “gran parte de la industria está sin pasar precio y nominal hasta que todo se clarifique un poco”.
En los promedios de la semana pasada hubo incrementos en todas las categorías según ACG. El novillo subió de US$ 4,05 a US$ 4,07 por kilo, la vaca se sitúa en US$ 3,82 y la vaquillona promedió US$ 3,96 por kilo.
El conflicto también golpea al mercado de lanares, en plena zafra, que venía con una racha alcista de precios y con buena dinámica, con preferencias por las categorías livianas. “Con este altercado está todo medio trancado también en los ovinos”, dijo Brown.
Las referencias de cuenta de ACG dan cuenta de la firmeza de valores: US$ 4,16 por kilo para los corderos con una suba de un centavo, US$ 3,38 las ovejas y US$ 3,48 los capones, con suba de tres centavos.
En el mercado de reposición se sostiene la firmeza. En el remate de Lote 21 el jueves pasado predominaron las subas. “Un mercado que sigue con firmeza, pujante en alguna categoría más que en otra”, comentó el presidente del consorcio, Federico Rodríguez.
Destacó la buena demanda de terneros tanto enteros como castrados, que no se veía en remates anteriores. En los novillos de 2 a 3 años hubo una puja vigorosa, comentó. Lo mismo que en la vaca de invernada y la pieza de cría, con buena demanda.
Los terneros promediaron US$ 2,65 por kilo, 1% arriba del remate anterior. Y US$ 521 al bulto.
Fue destacada la suba de precios para la vaquillona de 1 a 2, que promedió US$ 2,16, una mejora de 5,7% frente al remate previo. Las piezas de cría promediaron US$ 461, también con una mejora de 1%.
En ACG la firmeza de la reposición se expresa en el promedio de US$ 2,69 para los terneros con suba de un centavo, las terneras estables en US$ 2,25 por kilo y la vaca de invernada subió de US$ 1,66 a US$ 1,69 por kilo.