Los Estados miembros de la Unión Europea (UE) no lograron alcanzar este viernes 13 una mayoría suficiente para extender por 10 años la autorización al uso del glifosato. Será sometida a voto nuevamente en noviembre.
La Comisión Europea propuso en septiembre extender el uso del glifosato hasta el 2033 en base a un informe del regulador europeo que estimaba que el nivel de riesgo no justificaba su prohibición.
En una votación a puerta cerrada en el Comité Permanente de Vegetales, Animales y Piensos, la moción sobre la renovación no alcanzó el mínimo de 15 países miembros que representen por lo menos el 65% de la población del bloque.
Por tanto, con este resultado, la moción será elevada al Comité de Apelaciones, donde será sometida a voto en la primera mitad de noviembre.
En el caso que fracase nuevamente en noviembre, la CE podrá decidir por sí misma la eventual extensión de la medida durante 10 años más, y ante ese escenario sería necesaria una mayoría calificada para bloquearla.
La propuesta de la Comisión de respaldar la extensión de la autorización por una década se apoyó en un informe elaborado por un regulador europeo, que estimaba que el nivel de riesgo no justificaba la prohibición de la sustancia.
El laboratorio Bayer, fabricante de glifosato, declaró que sigue confiando «en que en el siguiente paso del proceso de aprobación haya un suficiente número de Estados miembros que acepten la renovación propuesta por la Comisión Europea sobre el glifosato».
Los miembros de partidos Verdes en el Parlamento Europeo, por otra parte, vieron la votación como una victoria en el camino hacia la prohibición.
El glifosato, la sustancia activa de diversos herbicidas, había sido clasificado en 2015 como «probable cancerígeno» por el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer.
Sin embargo, en julio de este año, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria sostuvo que no había identificado ningún «área de preocupación crítica» en humanos, animales y el medio ambiente que pueda impedir su autorización.
La entidad apenas observó «un alto riesgo a largo plazo en los mamíferos» para la mitad de los usos propuestos, y reconoció que la falta de datos impedía un análisis definitivo.
El glifosato es uno de los herbicidas más utilizados en el mundo y fue desarrollado por la empresa estadounidense Monsanto, que Bayer adquirió en 2017.
En base a DW y agencias