Uruguay suspendió temporalmente, en forma preventiva, la importación de productos y subproductos de origen animal procedentes de Alemania e Israel ante la detección de fiebre aftosa en sus territorios.
La restitución de las importaciones dependerá de la evolución de los eventos, de la información proporcionada por los servicios oficiales de los países involucrados y del reconocimiento que la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) otorgue, una vez que se den por finalizadas las acciones establecidas ante la contingencia, informó el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca en un comunicado.
“Esta medida tiene como objetivo mantener el estatus sanitario de Uruguay, como país libre de Fiebre Aftosa con vacunación reconocido desde el 22 de mayo del año 2003”, señaló el MGAP.
La fiebre aftosa es una enfermedad vírica infecciosa que afecta todas las especies de animales de pezuña hendida, tanto domésticos como silvestres, pero en ningún caso afecta al ser humano.
Alemania informó el viernes pasado que registró por primera vez desde 1988 un brote de fiebre aftosa en el estado federado de Brandeburgo, tras morir tres búfalos de agua a consecuencia de la enfermedad.
Las consecuencias del brote, según explicó el Ministerio de Agricultura alemán, es que el país perderá su reconocimiento como “libre de fiebre aftosa sin vacunación” por parte de la OMSA.
En el caso de Israel, la infección por el virus tuvo lugar en El Akbar. De acuerdo a lo que informó la OMSA la detección llegó luego de movimiento ilegal de animales o por el contacto con animales infectados en el pastoreo o en fuentes de agua comunes.