Por Eduardo Blasina
Con la llegada del primer stress hídrico, altamente probable que sea el fenómeno La Niña que esté instalándose, y a ello se agrega el calor estival que ya llega la semana próxima, el escenario ganadero ha dado un cambio.
Los productores han hecho bien en bajar carga, harán bien en seguir haciéndolo porque los veranos son cada vez más peligrosos.
Colocar ganado gordo arriba de US$ 4 por kilo de carcasa sigue siendo un buen negocio y priorizar el desempeño ganadero del rodeo que queda en el campo es una prioridad razonable.
El precio de exportación mientras tanto sigue firme de modo que lo que hay es un reacomodo de márgenes. el Novillo tipo en récord para el último dato reportado fue con márgenes mínimos para la industria.
El contraste que se observa en los valores del Novillo Tipo muestran lo poco sustentable de los precios que hubo hasta dos semanas atrás. Lo mismo el diferencial de precios con Brasil.
Ha llegado un ajuste de mercados y un primer desafío climático en este verano.