La industria frigorífica está proponiendo valores de US$ 3,50 por novillos y US$ 3,20 por vaca y “no se mueve de ahí”, dijo un operador del mercado ganadero, “lo que están buscando es que se mantengan los precios en US$ 3,60 a US$ 3,65 el novillo y de US$ 3,30 a US$ 3,35 la vaca y que no se disparen los precios”.
Los negocios no se están realizando. Las lluvias abundantes y generalizadas dan nuevo respaldo a la fortaleza de la posición del productor en una pulseada de valores que se instaló la semana pasada.
“Hubo una reducción de faena grande tratando de bajar los valores y con el estado de las pasturas no se pudo convalidar”, dijo a Ganadería.uy el integrante de Indarte y Compañía Juan Pablo Gutiérrez. “A iguales valores o algo menores se compensan con los kilos que se puede seguir ganando”, afirmó. Sostuvo que la industria no está tan comprada.
De acuerdo a Gutiérrez “estamos en un momento de equilibrio donde los valores no creo que cambien y en una situación en que la industria tiene margen y los productores tienen pasto”. El precio por novillo en las escasas operaciones que se concretan está en el eje de US$ 3,60 y US$ 3,65 los negocios de punta.
Las vaquillonas entre US$ 3,50 y US$ 3,55 muy demandadas para el abasto y con una cotización que se ha mantenido más estable.
Las entradas están cortas, en el eje de una semana a 10 días, y las lluvias han generado hasta ahora menos dificultades en las cargas de lo que se podía esperar.
Para Ariel Núnez de Freire Negocios Rurales, no se espera que el ganado vaya a seguir subiendo, sino que lo ve “buscando un nuevo precio de equilibro que va a ser de unos US$ 3,60 el novillo y US$ 3,25 a US$ 3,30 la vaca”.
Las entradas están cortas pero si las lluvias siguen la industria tendrá que pensar en flexibilizar los precios que propone para comprar ganado de pasto, indicaron actores del sector. Alguna planta grande está entrando novillos propios de corral, incluso para faenas kosher, que cubren algunos días de operativa.