El mercado lanero australiano mostró signos de recuperación esta semana cuando el Indicador de Mercados del Este superó la barrera de los US$ 8 por primera vez en lo que va de la zafra.
Un aumento en la demanda proveniente de China por algunos tipos de lana impulsó el IME a US$ 8,01 por kilo base limpia, 74 centavos de dólar americano o 10,2% más respecto al cierre de la semana pasada y el valor más alto desde mediados junio. En la divisa australiana el IME cerró en US$ 11,17 por kilo base limpia, con un aumento semanal de 9,3% o 95 centavos.
“Si bien los actuales niveles de precios, aún están lejos de los promedios que se alcanzaron la zafra pasada, se está comenzando a visualizar un mayor interés de algunos sectores de la demanda”, explicó José Luis Trifoglio de Zambrano y Cía. en su informe semanal.
Todas las categorías de lana registraron aumentos en sus cotizaciones. Las subas se ubicaron entre 3,3% las de 30 micras y 12,3% las de 19,5 micras.
La oferta no llegó a los 30.000 fardos (29.242 en total) y se colocó el 97,6% del total –el nivel más alto desde mediados de agosto de 2018-, un aumento de tres puntos porcentuales respecto a la semana pasada cuando se ofertaron 29.668 fardos y se vendieron 28.154.
El mercado local se mantiene sin actividad aunque se percibe un mejor ánimo. “Es probable, que en la medida que el mercado internacional registre cierto grado de estabilidad, se comiencen a recibir más pedidos y esto se traslade al sector productor. Lentamente se reciben consultas de los productores, mientras que, por el lado de la demanda, no se observa presión de compra. Estos dos factores son los que no permiten que se genere un flujo comercial y que el mercado prácticamente desde mediados de marzo se mantenga paralizado internamente”, explicó Trifoglio.