La producción global de carne vacuna caerá en 2025 por primera vez en cinco años, de acuerdo a la última proyección del banco especializado en materias primas Rabobank.
“Se prevé que la producción de carne de vacuno en las principales regiones productoras y consumidoras se contraiga un 0,8 % en 2025, en comparación con los volúmenes de 2024, lo que resultará en la primera contracción mundial de la carne de vacuno en cinco años”, apuntó en su informe trimestral Global beef quarterly Q4 2025, publicado la semana pasada.
Nueva Zelanda registrará la mayor caída porcentual en la producción, un 4,7 % (34 mil toneladas) frente al año anterior, mientras que Estados Unidos, tendrá la mayor caída en volumen, con una retracción de casi 500 mil toneladas (un 4 % menos interanual).
También caerá la producción en Canadá, la Unión Europea y Reino Unido: 3,9 % en el caso de Canadá (50 mil toneladas) y 3% la UE y Reino Unido en su conjunto (225 mil toneladas).
Por la senda contraria, estimó que la producción australiana de carne vacuna en 2025 será de aproximadamente 2,9 millones de toneladas, un aumento del 11% respecto de los volúmenes de 2024 y un nuevo récord.
China crecería 1 % impulsado por una mayor faena de ganado en el primer semestre. Mientras que Brasil alcanzaría un crecimiento del 0,5 % en la producción de carne vacuna 2025.
Rabobank proyecta que la producción de carne vacuna en 2026 continuará con una contracción estimada del 3,1 %.
El informe señala que las decisiones de la administración estadounidense sobre política comercial seguirán influyendo en el comercio de carne vacuna. El aumento de la cuota de Argentina en EEUU permitirá mayores volúmenes de carne con aranceles más bajos, pero los volúmenes de producción argentinos tardarán en aumentar.
Por otra parte, destacó que la decisión tomada a mediados de noviembre de eliminar los aranceles recíprocos sobre el comercio de carne vacuna no generaría ninguna ventaja comercial para ningún proveedor en particular. Sí en el caso de Brasil, que con la decisión de eliminar el arancel adicional del 40 % sobre la carne a finales de noviembre generaría un aumento en los envíos de carne a EEUU.