Movidito el comienzo del año, con una suba relevate del dólar en Brasil, que modestamente acompañó Uruguay y una caída muy fuerte de petróleo y granos, lo que es importante porque se da cuando hay una escalada de tensiones en Medio Oriente, Maersk ratificó que renuncia al pasaje por el Mar Rojo, Israel asesinó a un importante lider de Hamas en Beirut, y aún con ese contexto el precio del crudo arrancó 2024 alejándose de los US$ 80 por barril. La situación en Medio Oriente sigue siendo muy delicada y el petróleo puede subir si se sigue complicando, pero los récords de ventas de los automóviles eléctricos y la lentitud de la economía china, junto a la producción récord de petróleo de EEUU parecen incidir en el merrcado más que el riesgo geopolítico.
El dólar arrancó el año en Uruguay con una leve suba que no creemos que cambie el panorama de atraso cambiario que se ha acumulado especialmente durante 2022 y 2023. ¿Llegará el dólar a mucho más de $ 40 en el interbancario? Difícil. Los economistas que consulta el Banco Central lo esperan a $ 41,6 a fin de año, pero en 2023 lo esperaban en $ 42 y cerró en $ 39,02. En el primer día de 2024 cerró en $ 39,09, una suba de 0,18%.
Cuatro años del dólar en Uruguay
Poca chance de suba del dólar este año, pero sí bajará la tasa en pesos
El final del año trajo una baja de tasas por parte del Comité de Política Monetaria que en la reunión del pasado 29 de diciembre, decidió un recorte de 25 puntos básicos que dejó la tasa de Política Monetaria en 9%— cuando las proyecciones mayoritarias señalaban que las tasas se mantendrían sin modificaciones. El 4 de enero se conocerá el dato de inflación de 2023 que quedará muy cerca de 5%, a diciembre en 4,96%.
También en Brasil hubo una leve baja de la tasa Celic, pero que también mantienen tasas muy por encima de la inflación, lo que mantiene al real fuerte en el eje de 4,85.
Aquí en Uruguay el dólar cerró el 2023 en $ 39, segundo año consecutivo de caída del dólar en términos reales. Una baja en 2023 de 2,6%, que con una inflación de 5% daría una baja real de 7,6% y a una tasa en pesos de 9% daría una ganancia en dólares de 11,6%. Con tasas en baja en EEUU y una gran cosecha de verano en Uruguay que aumentará el ingreso de divisas, hay pocos argumentos para esperar una suba del dólar durante 2023.
Un tercer año en ese camino será un desafío importante para el agro. Y en el mundo se ve venir un dólar débil por tasas menores, al tiempo que las exportaciones agrícolas en Uruguay deben sumar unos mil millones más en 2024, lo que también debe incidir en el mercado cambiario.
El mundo espera un dólar débil, algo que entre otros aspectos se ha expresado en una suba fuerte del Bitcoin que empieza el año por encima de US$ 45.000 la mayor cotización desde abril de 2022.