El cambio de tendencia que la reposición había comenzado a reflejar se instaló con firmeza y el remate de Plaza Rural de este miércoles instaló nuevas referencias. La demanda continúa superando a la oferta y presiona los valores al alza.
Un remate excepcional que “dio vuelta el mercado”. Así definió Juan Brea Saravia a la jornada de este miércoles en la que se dispersó el 96% de la oferta de casi 9.000 vacunos.
Piezas de cría, vacas de invernada y vaquillonas fueron las categorías más destacadas con porcentajes de aumentos de dos cifras.
Las piezas de cría ajustaron 20% al alza, US$ 80 por bulto respecto al remate anterior de principios de noviembre.
Las vaquillonas de más de 2 años promediaron US$ 2,17, un incremento de 13,6% y las de 1 a 2 años subieron casi 10% y alcanzaron US$ 2,14.
El único lote de vientres preñados que encontró comprador –la categoría con menor porcentaje de ventas- hizo US$ 865, casi 30% más que en el remate anterior.
En terneros el promedio fue 4 centavos menor al de principios de noviembre, lo que se explica por la ausencia de oferta de terneros de menos de 140 kilos (un solo lote vendido a US$ 2,60) que levantan los promedios. El promedio fue US$ 2,32 y el precio al bulto fue de US$ 566 contra US$ 476, un aumento de 90 dólares o 17%.
La tranquilidad que trajeron las lluvias devolvió al mercado a compradores que no habían podido operar por condiciones climáticas, robusteciendo la operativa del mercado y el volumen de negocios.