El mercado de reposición afirmó sus valores en todas las categorías. Las lluvias registradas en los últimos días en el país y como consecuencia una mayor producción de pasto y el aumento de precios de la hacienda gorda influyeron en las ventas del primer remate del año de Lote21.
Los terneros lograron un promedio de US$ 2,14, un aumento de 12,63% respecto al remate de diciembre y con una colocación total de la oferta lo que ratifica una demanda ávida como consecuencia de las lluvias.
Otro aumento destacado fue el de los novillos de uno a dos años que subieron 17% respecto a un año atrás a US$ 1,85. Y también las vacas de invernada con aumentos de 18% respecto al remate de diciembre alcanzando los US$ 1,38.
Mauricio Cabrera, director del escritorio Tomás Cabrera Peile dijo a Tiempo de Cambio de radio Rural que esta tendencia de aumento tiene todas las señales de mantenerse y “este remate será dentro de 10 días un remate barato”.
En enero, la faena de vientres subió un 38% respecto a un año atrás y la participación de esta categoría subió por segundo mes consecutivo a 53%. Pero las lluvias y el repunte de precios en el mercado de reposición indican que está lejos de darse una liquidación ganadera y, esa posibilidad parece quedar lejos por un buen tiempo, el stock récord de vacas de cría no tiene por qué disminuir.