Los reportes de stock y área de cultivos en EEUU del USDA publicados este lunes estuvieron mayormente dentro de lo esperado y no tuvieron mayor influencia sobre los precios en la Bolsa de Chicago. La mejora del estado de los cultivos de soja y maíz, así como el avance de la cosecha de trigo, y el resurgir de la guerra arancelaría vuelven a ocupar el centro de la escena.
El incremento de las existencias de soja en EEUU a 27,44 millones de toneladas, por encima de las previsiones privadas de 26,67 MT se sumó a las presiones a la baja para la oleaginosa que representan la mejora de las condiciones de los cultivos recién sembrados y la ausencia de demanda de China en el mercado estadounidense.
La posición julio de la soja bajo US$ 1,30 por tonelada y cotizó a US$ 376,3 en Chicago con precios de US$ 355 en el mercado local.
El petróleo bajó levemente y el barril de Brent se estabilizó en US$ 67,6, un escalón por arriba del valor de mayo (+6%) pero US$ 10 dólares por debajo del precio de hace una semana por las tensiones en Medio Oriente, quitando sostén a los aceites.
La colza bajó en el mercado europeo aunque sostenida por el aumento de la cotización del euro frente al dólar al mayor valor en casi cuatro cotizó a US$ 574 por tonelada en la posición febrero y en Uruguay a US$ 510, lo que ha permitido fijaciones a precios superiores a los presupuestados.
El trigo diciembre en Chicago referencia para trigo y cebada cayó 3% en junio a US$ 206 por tonelada. El exceso de lluvias en Brasil está complicando el inicio del cultivo y podría haber alguna oportunidad para las exportaciones de Uruguay y Argentina.
El arroz en Brasil encamina una muy gradual suba que alcanzó a US$ 12,23 este lunes, el precio más alto en casi un mes.