El lunes tuvo ligeros descensos en Chicago tras subas significativas la semana anterior, que marcan la expectativa para el informe del USDA del miércoles que debe recortar la producción de trigo de Argentina pero puede incrementar el stock de granos en EEUU por la escasa salida derivada de la bajante del Misisipi. El aumento de casos de Covid en China también llama a la cautela. Para agregar incertidumbre, en breve culmina el acuerdo Rusia/Ucrania para el comercio en el Mar Negro y no hay certeza de que Rusia continúe.
Con ese contexto, los precois se mantienen firmes, la soja en Uruguay sigue sobre los US$ 525, la colza sobre US$ 555, el trigo con base en 300 a 310 y la cebada para malteo sobre US$ 290.
La cosecha de invierno por ahora avanza con colza y resultados buenos, mejores a los esperados y que alientan a pensar que el rendimiento será igual o incluso tal vez algo mejor que los 1.800 de promedio del año pasado.
El mercado más ajustado global y regionalmente es el trigo por las fuertes pérdidas de Argentina. Pero la incertidumbre respecto a la siembra de verano en Uruguay y Argentina también pesa dando sostén a la soja.
La soja firme en la previa de una siembra difícil en Uruguay y Argentina. Y los trigo en varias zonas están afectados (ver foto de hoy).
Lo que dejó la semana pasada y este lunes
Varios factores alcistas confluyeron la semana pasada para permitir un repunte de precios entre los tres granos principales. La sequía en Argentina sigue llevando a recortes en la producción prevista, a lo que se suma el exceso de lluvias en Australia que afecta a la calidad del trigo que se está cosechando. En esta semana algo de toma de ganancias y las dudas sobre la situación de China tanto en el plano económico como en su estrategia ante el Covid generaron una actitud más cautelosa.
El mercado de trigo se va estrechando. Es muy amenazante el comienzo del cultivo de trigo en EEUU por sequía. –la semana pasada marcó sólo un 28% bueno/excelente, contra el 45% de 2021–, que son las variedades que responden por cerca del 70% de la oferta total de trigo en EEUU. Este lunes eso mejoró a 30%, sigue muy por debajo de los parámetros que permitan un rinde aceptable, pero mejora levemente. EEUU tendrá muy poco trigo por 12 meses más.
Ayer el USDA mantuvo en el 74% la proporción de suelos destinados a trigos de invierno que experimenta condiciones de sequía, frente al 43% de igual momento de 2021. Kansas, que es el principal Estado productor de trigo, registra condiciones de sequía extrema sobre el 59,22% de sus suelos y sequía excepcional sobre, el 37,58%.
También influyeron en modo alcista la suba de los precios del petróleo que se acercó a US$ 100, la caída del índice dólar y la apreciación del euro, movimientos que alivian la competitividad de las exportaciones estadounidenses, y el muy mal estado de los trigos de invierno de Estados Unidos
Cabe recordar que según las últimas proyecciones del USDA el ciclo comercial 2023/2024 comenzaría con un stock inicial de 15,68 millones de toneladas, el más bajo desde la campaña 2008/2009, que arrancó con 8,32 millones de toneladas.
Disminuida la producción de trigo del Hemisferio Sur, también hay preocupación por el daño por heladas en el sur de Brasil sobre la siembra de soja y maíz.
Así las cosas, la semana pasada fue de subas importantes para soja principalmente. Este lunes dejó una cierta toma de ganancias y la incertidumbre respecto a la evolución del Covid en China, tanto en la cantida de casos (que crece) como en las políticas (que no se sabe si flexibilizarán o no).
Dado el momento que puede considerarse pico de la oferta de EEUU, los precios actuales parecen más que satisfactorios.