Luego de dos semanas con un nivel de actividad muy bajo -por el paro sindical y por semana de Pascuas- la faena de vacunos se recuperó y superó las 36.000 cabezas. Pero en el acumulado anual está 31% por debajo que en el mismo período del año pasado.
En la semana cerrada el 18 de abril se faenaron 36.604 cabezas, más del doble que las 16.153 de la semana previa y mil más que las 35.455 cabezas de igual semana del año pasado -semana de Pascuas-. Puede interpretarse como un repunte interesante en la demanda y un dato limitado por la escasa oferta disponible. Muestra la firmeza actual del mercado.
La preferencia de la industria por hembras se vio reflejada en la faena. Del total faenado, 21.328 fueron vacas, más del doble que la semana pasada y 2.000 más que las 19.223 de igual semana del año pasado. Tuvieron un 58% de participación, cuatro puntos porcentuales más que en igual semana de 2019.
La faena de novillos sumó 14.320, muy por encima que los 5.557 de la semana previa y un 9% menos que los 15.656 de igual semana del año pasado.
En lanares, con solamente cinco frigoríficos operando y dos de ellos concentrando el 86% de la faena, la actividad semanal fue de 4.022 cabezas. Por encima de las 119 faenadas en semana de Pascuas y 23% más que en igual semana del año pasado que coincide con las Pascuas. En el acumulado anual, la faena de ovinos está 15% por debajo que un año atrás.