En un mercado de hacienda gorda desparejo se empieza a insinuar un cambio de tendencia después de 10 semanas a la baja, que llevaron el precio promedio del novillo en ACG desde US$ 3,65 a US$ 2,96 por kilo carcasa.
“Dejó de bajar, que no es poca cosa y parecería ser que como las entradas se van acortando se va a estabilizar”, comentó Alejandro Dutra, director de Escritorio Dutra, con cierta cautela.
El novillo habría hecho piso en US$ 3 por kilo en cuarta balanza y la vaca gorda entre US$ 2,70 y US$ 2,80.
Christopher Brown, director de Agro Oriental, dijo a Ganadería.uy que “a principio de esta semana vi un cambio de tendencia; los frigoríficos empezaron a acortar las entradas, están más cortos y pidiendo ganado”.
Hay ganado terminado en los campos, pero la oferta sigue retraída y pretenciosa, tratando de capitalizar los kilos, por lo que no se están haciendo muchos negocios.
“Ya vendieron los que precisaban despejar puentes verdes y los que convalidaron la baja por necesidad de baja, y los que no vendieron están aprovechando las pasturas”, apuntó Brown.
“Aumentó el porcentaje de rechazo a las propuestas de la industria, con una posición más rígida por parte de la oferta en cuanto a no aceptar los valores; eso da lugar a este cambio de ambiente en que el productor está posicionado en valores por encima de lo que la industria estaba pretendiendo comprar”, dijo Gustavo Basso, director de Gustavo Basso Negocios Rurales.
En el correr de esta semana se han concretado negocios por encima de valores anteriores, una señal de que tenemos por delante un periodo de corrección o de nueva búsqueda de equilibrio en valores, afirmó.
Las referencias hoy para los novillos a pasto bien terminados están en los US$ 3 hacia arriba en ganados de punta, “con algunos productores que cierra posición en US$ 3,20”, dijo Basso en Tiempo de Cambio de Radio Rural.
Las entradas están más cortas, con perspectivas de correcciones de precios por delante “copiando un poco lo que está sucediendo en Brasil, donde se dio un rebote por encima del 20% por un desencuentro entre oferta y demanda que pautó una corrección de la que que no estamos ni cerca, pero sí en un incipiente cambio de tendencia”, sostuvo el operador.
Según Basso “vamos camino a tener una buena disponibilidad de ganado durante el mes de octubre” con una demanda agregada de faena kosher y es “altamente probable que la industria pretenda dar alguna señal de retraer un poco el empuje de demanda”.
La tendencia, de cualquier modo, es a buscar un equilibrio en valores más arriba de lo que hoy se están haciendo los negocios. Es necesario seguir semana a semana el mercado “porque para adelante entra a jugar el clima, la disposición y calidad del forraje, componentes importantes para la formación de mercado en noviembre”.
En ovinos, dijo Dutra, la demanda es firme con entradas cortas. Basso señaló que hay un buen nivel de actividad como preanuncio de una zafra de buena dinámica pero con un mercado internacional muy complejo por la presión de la enorme oferta de Australia a precios bajos.