Con un leve aumento de oferta de ganado gordo por un buen desarrollo de pasturas y verdeos y en plena faena para la Cuota 481, la industria propone un ajuste de valores del orden de cinco centavos por el ganado gordo.
Por los mejores novillos la referencia se ubica entre US$ 3,40 y US$ 3,45 por kilo en cuarta balanza, aunque algunos productores se han mostrado reticentes a aceptar ese valor. “El productor no va convalidar un ajuste marcado de valores porque de acá en adelante los ganados van a meter kilos”.
El negocio tanto para la vaca como para la vaquillona también se enfrió. La vaca cotiza en el eje de los US$ 3,25 y en el caso de la vaquillona US$ 3,30 para lotes bien terminados. Las entradas a planta están un poco más largas -15 días- porque algunos frigoríficos están comprados a 10 días o fuera del mercado por la faena de ganados de corral.
Reposición firme
En el remate de agosto de Lote21 el mercado se mostró ágil y demandado en todas las categorías. Los terneros alcanzaron un promedio de US$ 2,25, 3,7% más que el remate anterior, con un máximo de US$ 3,08 y un mínimo de US$ 2,02.
Los novillos de 1 a 2 años fue la única categoría que ajustó a la baja (-2%) respecto al remate anterior a US$ 1,92 –considerando que venían de una suba de 7% en julio-. Los novillos de 2 a 3 años subieron 7,2% a US$ 1,79. Mientras que los de más de tres años promediaron US$ 1,70.
“Fundamentalmente se notó una puja por los ganados que van con destino a la cuota 481: hubo terneros con peso por encima de los 200 kilos que promediaron US$ 2,15, en algunos casos más que los livianos”, explicó el presidente de Lote 21, Diego de María a Tiempo de Cambio de radio Rural.
Las vacas de invernada subieron 3,6% respecto al mes pasado a US$ 1,45 y las terneras hicieron un promedio de US$ 2,06, apenas 0,5% más que el promedio del año pasado.