China seguirá comprando carne y cada vez más por mucho tiempo. Pero no sabemos a qué precio y cuánta será la competencia para la carne uruguaya.
Mientras, en el mundo se siguen dando transformaciones que refieren a un persistente cuestionamiento a la producción de proteína animal, tanto carne como lácteos y que obligan a acentuar las medidas de diferenciación que protejan a los productos uruguayos de la ola de sustitución usando proteínas vegetales.
Aunque hay varios estudios que defienden al consumo de carne vacuna y lácteos, uno de los últimos el publicado por el sitio Antropoceno, http://www.anthropocenemagazine.org/2020/01/la-carne-no-siempre-es-el-principal-impulsor-de-las-emisiones-de-carbono-en-la-dieta/?lang=es lo cierto es que las empresas y la opinión pública parecen estar cambiando y la actitud de negar el evidente calentamiento global parece contraproducente.
Esta semana fue Starbucks que anunció un paquete de cinco medidas que apuntan a bajar la huella ecológica de la empresa usando menos carne y menos lácteos. Puede que estén equivocados, puede que la solución planteada sea peor que el problema. Pero lo cierto es que son empresas que reciben la tendencia de los consumidores y a la vez marcan tendencia con sus decisiones.
Las cinco medidas incluyen promover las imitaciones de carne y lácteos, en particular un fuerte aumento y promoción en el uso de sustitutos vegetales de la leche, pero también de las hamburguesas vegetales.
En un comunicado, el gerente de la empresa, Kevin Johnson, apuntó que ‘A medida que nos acercamos al 50 aniversario de Starbucks en 2021, miramos hacia el futuro con un mayor sentido de urgencia y convicción de que debemos desafiarnos a nosotros mismos, pensar en grande y hacer mucho más en asociación con otros para cuidar el planeta que compartimos. Hoy, estoy emocionado de poder compartir con ustedes nuestro compromiso de perseguir una aspiración audaz de varias décadas para obtener recursos positivos y dar más de lo que recibimos del planeta. Esta es una aspiración que asumimos, reconociendo que vendrá con desafíos y requerirá un cambio transformador. Como la mayoría de las cosas que valen la pena, esto no será fácil. Será necesario que todos desempeñemos un papel, por lo que lo invitamos a unirse a nosotros.’
Y a continuación el comunicado anuncia las cinco medidas en cuestión:
1. Ampliaremos las opciones basadas en plantas, migrando hacia un menú más ecológico.
2. Cambiaremos de empaque de un solo uso a empaque reutilizable.
3. Invertiremos en prácticas agrícolas innovadoras y regenerativas, reforestación, conservación forestal y reposición de agua en nuestra cadena de suministro.
4. Invertiremos en mejores formas de gestionar nuestros desechos, tanto en nuestras tiendas como en nuestras comunidades, para garantizar una mayor reutilización, reciclaje y eliminación del desperdicio de alimentos.
5. Innovaremos para desarrollar tiendas, operaciones, fabricación y entregas más ecológicas.
El comunicado también anuncia los objetivos de la empresa para 2030.
1. Una reducción del 50% en las emisiones de carbono en nuestras operaciones directas y cadena de suministro.
2. El 50% de nuestra extracción de agua para operaciones directas y producción de café se conservará o repondrá con un enfoque en comunidades y cuencas con alto riesgo de agua.
3. Una reducción del 50% en los desechos enviados al vertedero desde las tiendas y la fabricación, impulsados ??por un cambio más amplio hacia una economía circular. Para subrayar este compromiso, nos complace unirnos al Compromiso Global de la Nueva Economía del Plástico de la Fundación Ellen MacArthur, estableciendo objetivos circulares ambiciosos para nuestros envases.
El resultado este miércoles fue un salto en las acciones de Beyond Meats y una gran preocupación en la industria lechera que enfrentará en esta cafetería global una competencia mucho más fuerte de bebidas blancas generadas a partir de avena, avellanas, almendras, soja y otras proteínas vegetales.
Ahora que pasó el tsunami chino y que hay que volver a competir por diferenciar productos, esta tendencia no puede ser vista con indiferencia. La competencia de las proteínas vegetales ha llegado para quedarse.