Los precios extraordinarios que alcanzó el gordo hicieron aparecer un poco más de oferta de ganado de campo y las entradas se acortaron.
“Los valores atrajeron a quien no tenía pensado vender en este momento, apurando un poquito la extracción”, afirmó el consignatario Joaquín Abelenda.
Más allá de los lotes de novillos de excepción que alcanzan los US$ 5 por kilo en cuarta balanza, hoy los novillos buenos se venden a entre US$ 4,80 y US$ 4,90, dejando atrás el ya altísimo promedio de la grilla de ACG que marcaba US$ 4,73 para todos los novillos.
En la vaca gorda es más amplio el espectro, de US$ 4,60 a US$ 4,65 con algún negocio en el entorno de US$ 4,70 para los animales de punta que dan más de 240 kilos, la vaca buena de US$ 4,50 a US$ 4,60, y US$ 4,30 a US$ 4,35 los ganados generales.
Con la faena más cerca de las 55.000 que de las 50.000 cabezas, sigue existiendo gran demanda por todos los ganados y el interés principal es acceder a ganados de buena terminación y pesados, que son los que escasean y pusieron la vara en US$ 5 dólares.