Los mercados ratificaron este lunes una lógica de estabilidad en sus cotizaciones con subas leves que compensaron las bajas de la semana pasada. El trigo que era el que más había caído, repuntó, la soja que era la que venía más firme, bajó. El maíz tuvo leves subas con soporte en una reducción en la perspectiva de producción del maíz safrinha de Brasil. Pero también se vio arrastrado a la suba por la firmeza del trigo, que puede sostenerse porque a los problemas del trigo de invierno de EEUU se suma la demora en la siembra del trigo de primavera.
Mientras el conflicto se prolongue hay poco margen para descensos que en la semana pasada tuvieron más que ver con toma de ganancias que con cambios en los fundamentos. Aun así, se está trabajando por parte de la Unión Europea para dar salida al grano de Ucrania, mientras Naciones Unidas extrema esfuerzos para asegurar el abastecimiento global.
En Uruguay la soja se mantiene por encima de los US$ 600, pero con el ajuste de hoy quedó sobre los US$ 628, la colza sigue por encima de los US$ 700, pero muy volátil, ha llegado a US$ 780 pero cotiza a la apertura de esta semana sobre US$ 730, en tanto el trigo se mantiene en US$ 325 por tonelada como cotización “oficial” y la cebada se mantiene muy cerca de US$ 400, cotizando en el entorno de US$ 393.
La soja que venía muy firme, tuvo una leve baja
En la medida en que crecen las preocupaciones por un escenario global recesivo y también las alarmas por la inseguridad alimentaria (que por ejemplo fueron motivo de una llamativa tapa de The Economist) los precios agrícolas parecen encontrar dificultades en seguir su ascenso.
Pero los problemas de oferta son los que darán la respuesta definitiva al nivel de precios. En ese sentido el informe de avance de siembra de maíz y soja de EEUU y de estado del trigo son determinantes del comportamiento del mercado en Chicago.
La soja y el maíz avanzaron velozmente en la siembra la semana pasada y aunque siguen con cierto rezago respecto a lo normal, se van poniendo a tiro. En el caso de la soja se llegó a 50% del área plantada, superando levemente la expectativa del mercado (49%) pero todavía por debajo del ritmo del año pasado (73%) y del promedio de los últimos cinco años (55%).
El que se atrasó fue el trigo de primavera, que solo va sembrado en 49% cuando lo normal es 89% a esta altura del año, el mercado esperaba 56% ya sembrado. Eso se suma al ya irreversible mal estado del trigo de invierno, que está bueno a excelente en solo 28%, la misma proporción que la semana anterior y ya espigando, lo que determina que el rendimiento será pobre.
El trigo, que bajó la semana pasada, repuntó
Finalmente, también hay un buen avance del maíz que es el cultivo de verano que estaba más amenazado por la demora en sembrar y que va recuperando. En la semana pasada estaba sembrado 72%, cuando lo normal para la época es 79% pero confirmando un fuerte avance en las últimas dos semanas. La semana pasada iba 49%. Casi que mantiene la posibilidad de un alto rendimiento.
Entendemos que estos datos seguirán dando soporte al mercado del trigo. El maíz se ve sostenido también por una fuerte demanda por maíz estadounidense (Brasil está fuera de precio abasteciendo a su mercado interno) y se ve impulsado por el trigo. La soja puede ir rumbo a una buena cosecha de EEUU a la que podría seguir otra cosecha fuerte de soja en Brasil, aunque es un cultivo que todavía no ha empezado a sembrarse.
En Uruguay ya se ha cosechado aproximadamente 80% del área con muy buenos rendimientos que reafirman nuestra proyección de 3,2 millones de toneladas para esta zafra.