Después de un año 2021 que se cerrará con alrededor de 550.000 toneladas de carne vendidas al exterior, las proyecciones del informe de la Oficina de Programación y Políticas Agropecuarias (OPYPA) para 2022 señalan que el volumen de exportaciones crecería 2% el año próximo.
En consonancia con las perspectivas del Departamento de Agricultura de EEUU (USDA), apuntan que unas 11.000 toneladas se sumarían a ese total, que constituye un volumen de exportaciones histórico para la industria uruguaya.
“La demanda de Asia se mantendrá firme para el próximo año, y Brasil y Australia van a sacar partido de ello; el consumo de carne vacuna tendría un crecimiento global de 0,6%, pero China en particular alcanzaría 4,3%, el país con mayor crecimiento, mientras que en EEUU caería 2,8% y en la UE también se daría una merma en el consumo de 0,4%”, señala el informe de OPYPA presentado este miércoles 22.
Se espera un crecimiento del 1% en la producción mundial de carne vacuna para el 2022, con crecimientos en: Australia, con un “rebote” de 8%, gracias al crecimiento del stock; Brasil, también con más stock y mejores ecuaciones para las plantas procesadoras; e India, donde se resolvieron algunos problemas en la cadena de suministro.
Para 2022, el USDA proyecta un 2% de crecimiento en las exportaciones globales. Brasil, India, Australia, Canadá, Uruguay y México mostrarían valores positivos; mientras que EEUU, Argentina, Nueva Zelanda y Paraguay realizarían exportaciones menores que en 2021.
Suponiendo que las exportaciones en pie del ejercicio corriente sean del orden de 270.000 cabezas y asumiendo un procreo de 3 millones de terneros, el stock esperado para junio de 2022 sería de 12 millones de cabezas. De no ocurrir ninguna distorsión importante en el comercio, la faena del ejercicio 21/22 se ubicaría en torno a 2,4 millones de cabezas, sostiene el informe presentado este miércoles.
Relación de reposición
El análisis de la Oficina de Programación y Políticas Agropecuarias se detiene en el comportamiento “poco común” de las relaciones de precios de la reposición en los últimos 12 meses, en comparación con las variaciones observadas en más de 10 años.
“La relación ternero/novillo gordo, que alcanzó un récord de 1,32 en abril 2020, un año más tarde estaba en 1,23 y de ahí en adelante mostró una caída inusual, hasta un mínimo de 0,94 en octubre 2021”.
Entre agosto de 2009 y junio 2021, esta relación nunca había estado por debajo de la unidad. En términos reales, el precio del ternero a octubre 2021 estaba 8,2% por debajo del precio de un año antes, pero al mismo tiempo, el precio real del novillo gordo tuvo un crecimiento extraordinario de 8,7% en el mismo período y la transmisión del precio hacia la cría no fue completa, subraya.