El persistente déficit hídrico que está empezando a tener impacto en la productividad esperada de los cultivos de soja en Brasil está dando sostén al precio en el mercado de Chicago.
El viernes pasado la cotización para julio 2024 cerró con ligeras subas luego de cinco semanas a la baja, y este lunes agregó un nuevo empuje para llevar la referencia a US$ 498 por tonelada. Otro factor alcista fue el alza de los mercados de harina y aceite de soja después de que el ministro de Bioeconomía de Argentina, el principal proveedor de subproductos de la oleaginosa, dijera que se prevé un aumento de los impuestos a la exportación de harina y aceite.
Además, la buena demanda de exportación en Estados Unidos también apuntaló a la soja tras una serie de grandes ventas anunciadas la semana pasada y los rumores de un continuo interés comprador por parte de China: la semana pasada totalizaron 1,4 millones de toneladas cerca del extremo superior del rango de estimaciones comerciales.
En Uruguay el precio de la soja se ubica entre US$ 440 y US$ 445 por tonelada. En su Anuario 2023, presentado este lunes, Opypa proyecta la soja a un precio promedio de US$ 420 para el productor en la zafra 2023/24.
Las lluvias comienzan a hacer que aparezcan las primeras dudas sobre la capacidad de cumplir con la intención de área sembrada de soja. La proyección de ampliar en un 10% la superficie de la campaña pasada y llevarla a algo más de 1,2 millones de hectáreas está cada vez más condicionada a que el tiempo ofrezca las ventanas necesarias para la implantación.
Las mismas lluvias que han impedido completar las tareas de cosecha de cultivos de invierno, con un remanente de trigo que pierde calidad con cada nueva lluvia y que probablemente determine un ajuste en el volumen de oferta local. La cotización este lunes para el trigo en Uruguay estaba en US$ 203 por tonelada, mientras que la cebada cervecera se cotiza en US$ 217 por tonelada, la de exportación US$ 175 y la colza entre US$ 390 y US$ 395.
El trigo en Chicago anotó pérdidas en todos sus contratos, en un retroceso técnico y de toma de ganancias ya que las exportaciones estadounidenses siguen experimentando una baja demanda, apuntaron desde la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) en Argentina.
La abundante oferta mundial de trigo, sobre todo de Rusia, presionó la cotización del cereal que este lunes cotizó a US$ 226 por tonelada en la posición marzo 2024, bajando US$ 4,5 respecto al viernes.
La cosecha argentina de trigo mostró rindes mejores a los esperados y la Bolsa de Comercio de Rosario subió su estimación en 1 millón de toneladas. Pasó de 13,5 a 14,5 millones de toneladas gracias al impacto positivo que se registró en el cultivo por las lluvias y el clima fresco en una cosecha que lleva 57% de avance. La suba no alcanza como para dejar de situar esta campaña como la segunda peor de los últimos 8 años, pero supera en 26% la producción de la cosecha pasada.
Los futuros de maíz cotizaron en terreno mixto, con referencias de US$ 187 para marzo y US$ 192 en la posición mayo, mientras los operadores evaluaban la posibilidad de que las lluvias impulsen las cosechas en las zonas secas de Sudamérica, en medio de una mejora de la demanda de exportación estadounidense.
Las condiciones de los cultivos de maíz son muy buenas en Argentina y se aceleran los registros de exportaciones, que en las últimas cinco jornadas de actividad pasaron de 8,3 a 13,2 millones.
El precio del arroz en Brasil parece haber alcanzado un techo. Bajó ligeramente aunque se mantienen las condiciones que llevaron las referencias a niveles inéditos, por encima de los US$ 26 por bolsa, que alientan una suba de precio en Uruguay, que tendrá una zafra algo menor en superficie a la de 2023, pero con expectativas de mantener los rindes en el entorno de los 9.000 kilos por hectárea.