El dólar estadounidense ha alcanzado su punto máximo, perdió posiciones respecto a todas las monedas del G-10 excepto el yen japonés y es probable que siga debilitándose, anticipan los inversionistas, ante la hipótesis de un mayor déficit en EEUU y una recuperación global más amplia que favorezca los activos fuera de EEUU.
La mejora del crecimiento global es el factor que más incidirá en la moneda estadounidense y los analistas de mercados aconsejan colocar el dinero en activos como acciones de mercados emergentes y oro.
Las monedas de mercados emergentes deberían beneficiarse de la recuperación.
Pese a las grandes revalorizaciones de la moneda en 2021 -6,4% el año pasado- a mediano plazo se está gestando una situación mucho más negativa para la divisa estadounidense.
En Brasil el dólar bajó dos centavos hasta 5,51 reales brasileños, un descenso del 0,38% frente al dato del cierre previo, y en la última semana registró una disminución del 2,65%, aunque en términos interanuales aún mantiene un ascenso del 2,66%.
El dólar en Uruguay cerró el lunes a $ 44,56, con una leve baja de 0,06%, y en las primeras dos semanas de 2022 no ha bajado de $ 44,50.
Petróleo con margen para subir
El crudo Brent cerró a US$ 86,48 el barril, un aumento de 0,49% y los precios que este año ya han subido 10% podrían seguir incrementándose debido a la escasez de suministros, según los principales operadores del mercado.
El petróleo registró su cuarta alza consecutiva la semana pasada, la racha alcista más prolongada desde octubre, en medio de señales de que el consumo se mantendrá a pesar de la propagación de la variante ómicron del coronavirus.
El crudo Brent ha subido un 11% este año a más de US$ 86 el barril, ampliando el alza del 50% del año pasado. Es probable que EEUU vuelva a liberar petróleo de su reserva estratégica para intervenir a la baja en los precios del combustible.
En base a Bloomberg, Reuters y Cinco Días