El índice flaco/gordo, la relación de precios entre terneros y novillos en pie, se mantiene hace más de un año por debajo de 1.15, favoreciendo claramente al invernador. El indicador, que ha promediado 1,21 en el período 2015-2021, registra en el último año su período de niveles más bajos desde que hay registros, en 2011.
La última vez que el índice flaco gordo estuvo sobre 1.15 fue el 8 de mayo de 2021 de acuerdo a los promedios de cotizaciones semanales de la Asociación de Consignatarios de Ganado. Y a fines de junio del año pasado había perforado la barrera de 1.00, algo que no había ocurrido al menos en los últimos 11 años.
La causa de este desacople fue el incremento del precio del ganado gordo en el segundo semestre de 2021, que no fue acompañado en la misma proporción por reposición, apuntando la ecuación a favor de la invernada.
Para el segundo semestre de 2022 se espera una recuperación de los precios de la reposición por la necesidad de recuperar el stock ganadero. “Las consecuencias del proceso de extracción de los últimos 18 meses se van a ver en las declaraciones de Dicose dentro de algunas semanas, eso va a anunciar un cambio severo en las relaciones flaco / gordo en el próximo semestre y el próximo año”, anticipó Gustavo Basso, director de Gustavo Basso Negocios Rurales.
“Todo el que pueda va a tener que hacerse de la reposición lo antes que pueda porque estos niveles de extracción no van a ser sostenibles en el futuro”, dijo Basso en Tiempo de Cambio de radio Rural.
En febrero de este año, al comenzar la zafra de terneros, la relación flaco/gordo mostró cierta recuperación y estuvo entre 1.05 y 1.10, un indicador que no se alcanzaba desde mediados del año 2021, y que llegó a estar en 0.95 en octubre 2021 y 0.96 en enero 2022.
Sin embargo en el último mes fluctuó entre 1.05 y 1.07, que fue el valor del indicador para la última semana.
Antecedentes
En 2016, la relación de reposición alcanzó picos históricos de 1,45 que volvían casi imposible comprar terneros para engordar y se mantuvo en valores relativamente altos, aunque con una tendencia a la baja en 2017.
En 2020 la relación de reposición comenzó en 1,29 hasta llegar a mínimos de 1,12. La crisis turca generó una presión bajista en el ternero que hizo que la relación de reposición se volviera más favorable al invernador.