La incertidumbre que reina en los mercados mundiales con la pandemia del coronavirus afectó también al precio del novillo gordo en los principales países proveedores de carne.
En Brasil el precio del novillo gordo cayó 9% el último mes, pasando de US$ 3,07 a US$ 2,79 de acuerdo al índice Esalq elaborado por el Centro de Estudios Avanzados en Economía Aplicada, de la Universidad de San Pablo. Hubo un fuerte impacto del avance del coronavirus en Brasil. Los productores optaron por no hacer nuevos negocios, algunas industrias cerrarán unidades y los clientes en Europa, la región más afectada en este momento, ya están cancelando pedidos.
La misma situación atraviesa Argentina que mostró un descenso de 6% en el precio, pasando de US$ 2,86 a US$ 2,68 en un mes.
Uruguay fue de los países de la región el que tuvo una caída más abrupta. En cuatro semanas el novillo especial de exportación se desplomó un 19%, de US$ 3,60 a US$ 3,10 según reportes de operadores del mercado.
Las monedas de los principales proveedores de carne se han depreciado frente al dólar estadounidense en los últimos dos meses. ‘Los proveedores sudamericanos se han beneficiado de los cambios de divisas, con fuertes caídas en el real brasileño y el peso argentino que mantienen los precios del ganado competitivos y hacen que la carne vacuna sea accesible para los mercados globales. Existe la posibilidad de que el diferencial de precios entre los proveedores de Australia y América del Sur se amplíe, especialmente si las monedas de América del Sur siguen bajo presión, lo que aumenta la competencia’, explicó un informe de Meat and Livestock Australia.
Australia y Estados Unidos van por el mismo carril
Las precipitaciones y la escasez de oferta provocaron un incremento en el precio del ganado australiano que alcanzó un techo de US$ 4,19 por kilo al gancho en la última semana de febrero. Pero que en las últimas dos semanas no se salvó de las consecuencias de la pandemia y alcanzó los US$ 3,58, una caída de 15% respecto al pico.
El precio del novillo en EEUU cayó 10% en un mes a US$ 3,84 ya que la incertidumbre sobre la economía, la demanda de los consumidores y el impacto potencial en la capacidad de procesamiento ha sacudido los mercados.
‘Si bien los precios del ganado en los Estados Unidos se han visto presionados a la baja, la fortaleza del dólar ha compensado en parte estas caídas para los importadores mundiales’, explicó el informe de MLA Australia.
De todos modos, en EEUU la demanda por carne vacuna es muy firme porque la gente ha salido a stockearse. Los futuros subieron la semana pasada y recién retrocedieron este miércoles. Las ventas en supermercados fueron muy abundantes. Pero es también un momento de oferta abundante y de incertidumbre respecto a las exportaciones.